El grupo independentista catalán, Tsunami Democràtic, convocaron a sus seguidores de twitter a manifestarse durante el clásico español, Barcelona-Real Madrid, en el interior de las instalaciones del estadio Camp Nou, a favor de la liberación de los presos políticos y el diálogo con España.

En esta jornada, en la que jugará el equipo catalán Barcelona contra el capitalino Real Madrid, los independentistas han propuesto llevar pelotas inflables para lanzarlas durante el partido entre los espectadores y probablemente a la cancha.

Los inflables llevarán mensajes o serán de color negro para demostrarle a Madrid y al mundo la urgencia del diálogo, así como una pancarta (manta) que diga “Spain, sit and talk” (España, siéntate y habla).

La innovación de la jornada, el empleo de las pelotas, no fue una idea original de la agrupación independentista ni de otros colectivos como el comité CDR Catalunya, este movimiento innovador fue publicado en el diario español La Vanguardia y aunque era información falsa atribuida al colectivo, Tsunami Democràtic lo tomó como una buena sugerencia.

La acción fue renombrada #LaVanguardiaChallenge dando crédito al periódico nacional por la idea de una nueva forma de protestar, asegurando que el movimiento independentista se adapta como el agua y adopta nuevas ideas sin importar de dónde vengan.

A pesar de que Tsunami Democràtic ha remarcado que sus acciones son pacíficas el gobierno de la nación envió 500 elementos de la guardia antidisturbios nacional, agregados a la policía local, llamados Mossos d’esquadra, y los 2 mil vigilantes privados del estadio.

El dispositivo de seguridad incluirá una estrategia poco común para trasladar a los jugadores, ya que se hospedaron en el mismo hotel durante la concentración e ingresarán por la misma puerta y al mismo tiempo que el cuerpo arbitral informó la directiva del club.

La dirección del club Barcelona también advirtió a su afiliados que de ser identificados como parte de las protestas perderán su carnet oficial y los beneficios que este incluye.

Esta jornada de juego ya había sido cancelada en su fecha original, el pasado 26 de octubre, ya que las protestas en Cataluña se intensificaron por la condena impuesta a los líderes independentistas.

Se calcula que 650 millones de personas en todo el mundo sintonizarán la transmisión de este partido, por lo que se convierte en una plataforma ideal para los independentistas que buscan que su mensaje sea atendido.

El estadio Camp Nou es históricamente era el espacio de protesta catalana, durante la dictadura franquista en España (1939-1975), en este sitio era normal hablar en catalán, a pesar de que estaba prohibido utilizar lenguas que no fueran la castellana en todo el país y el equipo representó una bandera de independencia y libertad.