El Tri encontró en Dinamarca a su aguafiestas.

El 2-0 que le propinó ayer el cuadro europeo a México no sólo terminó por enmarcar la crisis extra cancha que envuelve a la Selección Nacional, también evidenció que el caos ya se extendió hasta el terreno de juego a sólo siete días del choque ante Alemania.

En un partido que los daneses utilizaron para sacarle filo a Christian Eriksen, Yusuf Poulsen, Nicolas Jorgensen y Thom Delaney, las dagas con las que luchará en el Grupo C de Rusia 2018, Juan Carlos Osorio, en cambio, sometió a su equipo, nuevamente, a prueba y error con un resultado nada alentador.

La rodada Selección danesa, que tiene en Eriksen como uno de los mejores mediocampistas del mundo, desató los peores fantasmas en la defensa tricolor, ayer expuesta gracias a los errores de Carlos Salcedo, Jesús Gallardo y un disminuido Rafael Márquez.

De las buenas noticias que pudo rescatar México se encontraron los regresos como titulares de Héctor Moreno y Andrés Guardado, no así el de Diego Reyes, a quien el cuerpo médico del Tri y Osorio mandaron a la tribuna antes de darle una enésima oportunidad para mostrarse sano y llegar, de milagro, al Mundial.

Por si fuera poco, Héctor Herrera, el más señalado de los fiesteros, y también uno de los talentosos de la plantilla, fue relegado como mediocentro, casi un suicidio deportivo para un futbolista de sus características.

Pero quizá también, El «Zorrillo» fue una necesidad para una defensa que se derrumbó a pedazos con Salcedo perdido como lateral y central, y Gallardo expuesto en el flanco izquierdo.

Por ahí entró Dinamarca en el inicio del complemento, ayudado también de las seis rotaciones que lanzó Osorio en un lapso de 14 minutos.

La primera daga le entró al Tri con un golazo de Poulsen, al 71′. Un recorte del danés bastó para desactivar la marca conjunta de Salcedo y Gallardo, después, el zurdazo al angulo dejó sin chances a Ochoa para el 1-0.

Y tres minutos más tarde, Eriksen abusó de la inocencia de Salcedo y Gallardo, y de la lentitud de Márquez, ya en el campo, en un saque de banda para escaparse y anotar el segundo tanto.

La sacudida despertó al Tri. Javier Hernández y Marco Fabián, otros dos de los recambios, reaccionaron, pero «Chicharito» mandó un tiro al poste, y Fabián disparó desviado.
Al Tri ya se le fue la sonrisa, y eso que hace una semana estaba de fiesta.

Delanteros sin gol

A los centrodelanteros del Tri se les fue el gol.

Entre Raúl Jiménez, Javier Hernández y Oribe Peralta apenas lograron anotar un tanto entre los 8 partidos de preparación que sostuvo la Selección Nacional de cara al Mundial de Rusia 2018.

Sólo Jiménez fue capaz de marcar durante los amistosos, y lo hizo ante Polonia el pasado 13 de noviembre en el Stadion Energa de Gdansk.

Desde ese encuentro hasta la fecha, los centrodelanteros del Tri suman 6 partidos sin gol.