Levantar un acta ante el Ministerio Público es una de las primeras decisiones a tomar para evitar ser víctima de fraude, de endeudamiento o robo de identidad en caso del robo o extravío de la credencial de elector, licencia para conducir y tarjetas bancarias.

La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) comentó que es común que en la cartera se carguen estos documentos importantes, por lo que en caso de robo o extravío, recomendó primero tranquilizarse y luego tomar decisiones inmediatas.

En su publicación “Consejos para tu bolsillo”, el organismo señaló que en caso de robo o pérdida de tarjeta de crédito o débito, debe reportarse inmediatamente al banco del titular de los plásticos.

La institución será responsable de cargos que no reconozca el titular en su tarjeta de crédito o débito, realizados durante las 48 horas previas al aviso de robo o extravío, pero podrá exigirle el pago de cargos recurrentes u otros previamente autorizados por el tarjetahabiente.

El banco deberá abonar a la cuenta los cargos no reconocidos a más tardar el cuarto día hábil bancario, siguiente al día que el titular se inconformó, pero precisó que a partir de septiembre de este año se abonarán al segundo día hábil.

En el caso de la licencia para conducir, apuntó que esta sí tiene un costo para reponerla, además de que no cargar con ella al momento de ir al volante puede tener serios repercusiones para el titular y para su bolsillo.

Es importante levantar un acta especial ante el Juez Cívico, preferentemente el más cercano al domicilio, y posteriormente se deberá iniciar el trámite para la reposición del documento.

Sobre la credencial de elector, la Condusef comentó que si bien no cuesta reponerla, vale más de lo que se piensa, ya que contiene datos como nombre, dirección, firma, entre otros.

Dicha información puede ser utilizada para suplantar la identidad y derivar en la contratación de créditos a nombre del titular de la credencial de elector, o la utilización de aquellos con que ya cuenta, sin que sepa de su existencia o de su mal uso.

“Levantar un acta por robo o extravío ante el Ministerio Público es fundamental, ya que este es un elemento para probar que tú no eres quien ha hecho mal uso del producto o servicio financiero”, aconsejó el organismo.