«Canelo» le quitó lo invicto y los cinturones de campeón mundial al «GGG».
Una pelea de desempate que llegó un año después y que cumplió con las expectativas. Los dos terminaron fulminados, cansados y con muchas huellas del combate.
A los jueces les tocó decidir nuevamente el destino del pleito. Uno dio empate a 114, mientras que otros dos vieron ganar 115-113 al mexicano Saúl Álvarez, quien se agenció los cetros Medianos del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y Asociación Mundial de Boxeo (AMB) ante una repleta T-Mobile Arena de Las Vegas.
Fue un pleito parejo, donde al final los más de 20 mil asistentes quedaron satisfechos, sin reclamos para los jueces que puso la Comisión Atlética del Estado de Nevada.
«Canelo» cambió por completo la estrategia en esta ocasión. Se le acusó de correr en la primera, y ahora se plantó para atacar en varias ocasiones, algo que hizo retroceder al kazajo.
Pero el poder del «GGG» fue feroz, y en dos asaltos durante la pelea le hizo daño a «Canelo», quien aguantó y mostró mejor condición física.
Saúl terminó con un severo corte en la ceja izquierda que se lo hizo «GGG» desde el tercero, mientras que Golovkin acabó con distintas huellas en ambos ojos.
Al final del pleito, el mexicano de 28 años dijo que si la gente pedía la tercer pelea se daría, pero que «ahora quiero descansar un rato y disfrutar que soy campeón de nuevo».
Golovkin, de 36 años, no quiso dar declaraciones al público. Bajó del ring y se fue a su vestidor.
Gennady buscaba imponer una marca de 21 defensas exitosas de la corona Mediana, algo que no sucedió.
Saúl se quedó con marca de 50-1-2, 34 KO´s, mientras que «GGG» ahora tiene 38-1-1, 34 KO’s.
Y antes de irse, Saúl dio el grito de guerra para todos los mexicanos que lo acompañaron en el Día de la Independencia, «gracias y ¡Viva México cabrones!».
Con información de Reforma