Los legisladores británicos votaron este lunes para arrebatar el control del Brexit a la Primera Ministra Theresa May por un día en un intento por encontrar un camino a través del impás de separación de la Unión Europea que una mayoría en el Parlamento podría apoyar.

Los legisladores ahora deberían votar sobre una variedad de opciones de Brexit el miércoles, dándole al Parlamento la oportunidad de indicar si puede llegar a un acuerdo sobre lazos más estrechos con Bruselas, y luego tratar de empujar al Gobierno en esa dirección.

La medida subrayó hasta qué punto May ha perdido su autoridad, aunque dijo que el miércoles no se verían obligados por los resultados de los llamados votos indicativos.

La votación del lunes fue presentada por Oliver Letwin, un legislador del Partido Conservador de mayo, y llegó luego de que la Premier admitiera que el acuerdo que había acordado con la UE luego de dos años de conversaciones aún no contaba con el apoyo suficiente para aprobarlo.

Los legisladores respaldaron la propuesta de Letwin por 329 votos contra 302, y casi con certeza confirmaron su decisión en la votación final de la tarde sobre la «moción general enmendada».

Anteriormente, May dijo que la propuesta sentaría un precedente incómodo y podría llevar a apoyar un resultado con el que la propia UE no estaría de acuerdo.

«Ningún Gobierno podría dar un cheque en blanco para comprometerse con un resultado sin saber qué es», dijo May antes de la votación. «Por lo tanto, no puedo comprometer al Gobierno a entregar el resultado de los votos de esta Cámara».

La semana pasada, la UE acordó retrasar la fecha de salida del 29 de marzo original de Gran Bretaña debido al punto muerto. Ahora, dejará la UE el 22 de mayo si el Parlamento aprueba el acuerdo de mayo esta semana. Si no, tendrá hasta el 12 de abril para delinear sus planes. La votación del lunes fue un intento de encontrar una manera de idear un plan de este tipo.

El Presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, dijo la semana pasada que todas las opciones de Brexit aún estaban abiertas para Gran Bretaña hasta el 12 de abril, incluido un acuerdo, una partida sin acuerdo, una larga extensión, o incluso la revocación del artículo 50 y la permanencia en la UE.

Pero casi tres años después del referéndum de membresía de la UE de 2016 y cuatro días antes de que Gran Bretaña debía abandonar el bloque, aún no estaba claro cómo, cuándo o si se llevaría a cabo el Brexit, con el Parlamento y la nación aún divididos.

El acuerdo de mayo fue derrotado en el Parlamento por 149 votos el 12 de marzo y por 230 votos el 15 de enero, pero ella había indicado que lo devolvería por tercera vez esta semana.

Para que se apruebe su acuerdo, May debe ganar a al menos 75 diputados que votaron en contra de ella el 12 de marzo: docenas de rebeldes en su Partido Conservador, algunos diputados del Partido Laborista de Oposición y el Partido Sindical Democrático de Irlanda del Norte (DUP), que apuntala a su Gobierno minoritario pero ha votado en contra del acuerdo hasta el momento.

«¿Por qué la Primer Ministra esperaría que brindáramos apoyo a un acuerdo que se basa en una mentira?», Dijo el portavoz del DUP Brexit, Sammy Wilson, a la televisión de la BBC.