El plan de seguridad para la vigilancia y control de los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) ha sido satisfactorio, por lo que se contempla una reducción de ocho a cinco mil efectivos durante 2020, expuso el director general de la empresa, Octavio Romero Oropeza.
Durante su exposición en la conferencia matutina en Palacio Nacional, refirió que desde que comenzó la actual administración, a partir de enero de 2019 se desplegaron 50 elementos de seguridad por cada 20 kilómetros, con ocho mil efectivos de la Guardia Nacional y militares.
“En 2020 serán cinco mil efectivos, se ha dado un retiro de las fuerzas federales en tres ductos y se optimizó la vigilancia desplegando bases de operación cada 30 kilómetros en ductos de menor incidencia”, expuso el titular de Pemex al señalar que se redujo el robo de combustibles en 91 por ciento.
Explicó que en los operativos desarrollados a lo largo de 2019, se utilizaron cinco aviones, 10 helicópteros y 21 naves no tripuladas, que sumaron miles de horas de vuelo, lo que permitió la vigilancia de los ductos diseminados por el país, para evitar el robo de hidrocarburos.
El funcionario federal indicó que en este primer año hubo siete agresiones a los cuerpos de seguridad que cuidan el traslado de hidrocarburos por el territorio nacional, en las 612 pipas que se adquirieron para tal fin y durante ese mismo periodo hubo 80 eventos relevantes relacionados con tomas clandestinas.
Por último, Romero Oropeza explicó que el trabajo realizado en el centro de control de la Ciudad de México les permite mejorar los tiempos de respuesta cuando se detecta una baja de presión en las tuberías que conducen combustibles por el territorio nacional.