La política pública del actual gobierno federal no ha encaminado al país hacia el crecimiento económico, aseveró Juan Carlos Botello Osorio, Director de la Facultad de Comercio y Estrategia Internacional de la UPAEP.
Dijo que no basta con tener buenas intenciones por parte del presidente de México y miembros de su gabinete de trabajo cuando al interior del propio gobierno federal hay grupos que están manejando “otro discurso en contra de ello”, lo cual demuestra que no hay un trabajo de conjunto dentro del mismo gobierno federal.
Manifestó que la inversión en el país durante el 2019 cayó un 8 por ciento y esto demuestra también que sin inversión no hay crecimiento económico. Agregó que “el crecimiento económico que más o menos se tiene pensado de acuerdo a pronósticos del presidente López Obrador, para su sexenio íbamos a crecer un 4 por ciento, pero sobre su gestión administrativa ha ido corrigiendo las cifras a un porcentaje mucho menor y ahora el discurso es otro. Señala que lo importante es el bienestar de la gente aunque no haya crecimiento económico y desarrollo en el país”.
Juan Carlos Botello advirtió que para lograr un crecimiento del 4 por ciento en lo económico, se necesita que haya 25 o 27 por ciento de inversión del Producto Interno Bruto (PIB), para crecer apenas el 3 o 3.5 por ciento como lo venía haciendo el país anteriormente, pero es una situación que no está sucediendo.
Señaló que al hablar de una economía en recesión, es importante distinguir entre los principales sectores que se encuentran en recesión, “como es el sector manufacturero, y el sector automotriz en donde encontramos una mayor afectación una mayor recesión”.
Afirmó que sólo con la inversión pública y privada se saldrá del bache en que se encuentra el país, toda vez que, “en la historia económica de nuestro país, nunca se ha caído en dos años consecutivos en un crecimiento económico nulo o con una contracción significativa como la que se está viendo actualmente. Estamos iniciando el segundo mes del 2020 y aún no hay nada positivo en lo económico”.
Enfatizó que el entrar a un segundo año en recesión, es preocupante ver en qué escenario se podrá mover nuestro país, ya que este bache económico es provocado por el mismo gobierno, por las decisiones que está tomando en todos los rubros que se encuentran de alguna forma vinculados, falta de confianza por parte de los inversionistas tanto nacionales como internacionales, por factores como la inseguridad que se vive, la falta de certeza política por parte del gobierno con respecto al rumbo que lleva el país, las decisiones erróneas que ha tomado la actual administración federal con respecto a la cancelación del nuevo aeropuerto internacional de la Ciudad de México, la producción de petróleo, y la reforma energética concentrada en el mismo gobierno, entre otras.
Acotó que la inversión pública durante el 2019 cayó un 11 por ciento aproximadamente, lo cual tampoco es bueno porque fueron bajas las inversiones que realizó el actual gobierno, puesto que su gran proyecto de infraestructura es la construcción del aeropuerto de Santa Lucía, en donde como van la cosas, estará terminado en el 2027; el Tren Maya y la construcción de la refinería de 2 Bocas; también la inversión privada cayó 5.5 por ciento, debido a la desconfianza que tienen los inversionistas, “siguen invirtiendo pero no al nivel que se espera”.
Con respecto a Puebla, en el 2019, el crecimiento económico fue de 0.2 por ciento, que fue mínimo, en donde los empleos formales acumulados fue de 9 mil 213, cuando la meta era de 60 mil 500 nuevas fuentes de trabajo. Además de que creció la informalidad en 1 por ciento con base a los datos obtenidos hasta el momento.
Por lo tanto, “la clave para lograr un crecimiento económico es llevar adelante la inversión pública y privada tanto de nacionales como de inversionistas extranjeros, pero que éstas sean nuevas y no sólo reinversiones de empresas que ya están metiendo dinero al país. Porque de lo contrario, se estará viendo un panorama oscuro para nuestro país con respecto al crecimiento económico”.
Subrayó que regalar dinero en programas sociales que no llegan a ningún propósito productivo del país, no es bienestar porque el dinero se acaba, como es el caso del programa de “jóvenes construyendo el futuro”, que tenía una meta la cual no cumplió el año pasado y se quedó sólo en 900 mil jóvenes inscritos en el programa y que están percibiendo 3 mil 600 pesos mensuales, “representan recursos millonarios que se están yendo a la basura, ya que sólo el 2.2 por ciento fue creación de empleo, principal objetivo del programa, generar nuevos empleos. Por consecuencia son los empleos más caros que se han creado en la historia de México”.
Por su parte, Anselmo Chávez Capó, catedrático de la Licenciatura de Administración Financiera y Bursátil de la UPAEP, reiteró que se estima que la inflación para el 2020 sea de un 3.5 por ciento y para el 2021 de 3.52 por ciento respectivamente.
Agregó que de acuerdo a estimaciones de la iniciativa privada se espera que el crecimiento del PIB para el 2020 sea del 1 por ciento, mientras que para el 2021 se registre en un 1.64 por ciento respectivamente, crecimientos menores a los considerados por la Secretaría de Hacienda.
Expresó que el 2019 fue un año de aprendizaje para el gobierno de la 4T y ahora el 2020 es un año para sustentar las bases para el crecimiento que eventualmente vendrá en el 2021 en donde coinciden con las elecciones intermedias.