Londres, 15 Dic (Quién).- Se sabe que el príncipe Harry y Meghan Markle decidieron no viajar a Reino Unido para pasar las fiestas de fin de año junto a la familia real británica, a pesar de que recibieron invitación de la propia reina Isabel II para que se unieran en la tradicional cena Navideña, que año con año celebran en Sandringham. A pesar de lo anterior, y de los miles de kilómetros de distancia que los separan, la reina quiere tener un acercamiento con su nieto y su familia, al menos así lo asegura en su canal de YouTube Neil Sean, experto en realeza. Él comenta que una de las costumbres que más disfrutan los royals es el intercambio de regalos, por lo que quiere que Harry, Meghan y sobre todo sus bisnietos, sean parte de esta dinámica familiar.
Pero eso sí, aunque la costumbre es hacer regalos de broma y nada costosos, en este caso la monarca les enviará “algunos obsequios pero será muy formal”. Neil agregó que definitivamente los Sussex recibirán “un regalo de la reina” porque “ella es demasiado amable para ser infantil como para no incluirlos en los regalos”. Y todo indica que no será la única que envíe algo hasta California, pues el príncipe William y su esposa Kate Middleton también quieren mandarles algo, pero en específico a Archie , de 2 años, y a Lilibet Diana , de 6 meses. Los duques de Cambridge tienen la costumbre de siempre dar regalos a los niños de la familia. Si bien, muchos creían que por ser la primera Navidad de la reina Isabel tras la muerte de su esposo, Felipe de Edimburgo, y por los recientes problemas de salud que la obligaron a alejarse de muchos actos oficiales en los últimos dos meses, Harry y Meghan podrían decidir viajar y aprovechar la oportunidad de pasar tiempo de calidad con la soberana, pero ni lo anterior fueron razones suficientes para hacerlos cambiar de parecer.
Todo indica que los duques de Sussex tendrán una Navidad privada en su casa en Montecito. De hecho, esta no es la primera Navidad que pasan lejos de la familia real, pues ya el año pasado se habían mudado, pero en ese entonces la relación no estaba tan desgastada. En diciembre de 2020, la reina Isabel mandó un regalo para Archie, fue el propio Harry quien contó a principios de este año: “Es interesante que mi abuela nos preguntó lo que Archie quería para Navidad y Meghan le dijo que una máquina de waffles”, y la soberana cumplió el deseo de su bisnieto. Sin duda, el 2022 será un año que puede ser crucial para la familia real, tomando en cuenta que se celebrará el Jubileo por los 70 años en el trono de la reina Isabel en medio de sus problemas de salud derivados de su edad, 95 años. Y a lo anterior, hay que agregar la demanda civil por abuso sexual que hay contra el príncipe Andrés, y el libro de memorias que Harry publicará justo por las fechas de las celebraciones del Jubileo.