Al mejor estilo de la serie de Netflix Black Mirror, Jane Slater, una reportera de la NFL Network, compartió el miércoles en Twitter cómo la tecnología puso en evidencia a su pareja.
La historia sucedió cuando su antiguo novio -cuyo nombre no reveló- le regaló un rastreador de ejercicios en Navidad para que coincidiera con él, que ya tenía. A través de la aplicación de Fitbit, la pareja podría monitorear sus niveles de actividad física.
Así, la corresponsal de 39 años notó un aumento inesperado y repentino en su ritmo cardíaco y actividad física a las 4 de la mañana y descubrió que su pareja la engañaba.
“Una vez un exnovio me consiguió un Fitbit para Navidad. Me encantó. Nos sincronizamos, nos motivamos el uno al otro… no lo odiamos hasta que él desapareció a las 4 am y sus niveles de actividad física aumentaron en la aplicación. Desearía que la historia no fuera real”, twitteó Jane.
Con casi 420,000 “me gusta”, la publicación generó todo tipo de respuestas en Twitter, como esta, que revela que la experiencia de la periodista no es única:
“Jane! Atrapé a mi exesposo en una aventura porque llevaba puesto el reloj de entrenamiento y el monitor de latidos que mi madre le compró para Navidad, mientras ‘corría’». Fue el aumento de la frecuencia cardíaca de menos de un minuto lo que me confirmó las cosas!”, compartió @carey_gibbons.
“Lamento mucho que te haya pasado, pero esa es una historia increíble. Tengo muchas preguntas ¿Qué pasó cuando lo confrontaste? ¿Lo admitió o trató de eludirlo? ¿Le dijiste de inmediato que era él por el Fitbit o solo que sospechaste de lo que dijo?”, cuestionó @MatthewBerryTMR.
“He pasado por eso. Sin embargo, no lo descubrí por Fitbit. La actividad física de mi ex solo hubiera aumentado por 90 segundos, por lo que de todos modos habría sido prácticamente imperceptible”, ironizó @just_mindy.
De Peloton a papelón
El relato de Jane se dio en respuesta a un tuit sobre el último anuncio del fabricante de equipos de ejercicio de alta gama Peloton, acusado de “sexista y distópico”. El comercial de 30 segundos muestra a un hombre regalándole a su pareja una bicicleta estática para Navidad.
«Hace un año no me daba cuenta de cuánto me cambiaría esto», dice la joven al encontrar el presente bajo el árbol navideño.
De acuerdo con The Guardian, la crítica consideró «ofensivo» y «tonto» al comercial, señalando que la mujer ya era delgada al principio y el hecho de que su pareja crea que necesita ponerse en forma y perder peso es condescendiente y perjudicial.
El impacto general fue tan negativo en la audiencia que rápidamente las redes sociales se llenaron de memes y las acciones de Peloton cayeron un 9% desde que apareció el anuncio por primera vez hace aproximadamente un mes.
Ahora que se acerca Navidad, mejor pensar dos veces qué vamos a regalar.
An Ex Boyfriend once got me a Fitbit for Christmas. I loved it. We synched up, motivated each other… didn’t hate it until he was unaccounted for at 4am and his physical activity levels were spiking on the app 🥴wish the story wasn’t real. https://t.co/npRkLJYYz0
— Jane Slater (@SlaterNFL) December 5, 2019
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