Ciudad de México, 14 Jul (El Informador).- Muchos son los actores que, con la intención de consolidar sus carreras, deciden dar el salto hacia el extranjero en busca de nuevas oportunidades; tal es el caso de Sandra Echeverría, quien en hace algunos años se fue a Estados Unidos para tratar de conquistar Hollywood.
La también cantante puso conseguir algunos proyectos, uno de ellos fue la cinta «Savages», al lado de la mexicana Salma Hayek; sin embargo, la experiencia que vivió durante el rodaje la cinta la hizo desistir de sus sueños ya que aseguró fue víctima de «bullying» por parte de dos reconocidos actores que se encontraban en el reparto.
Fue a través de sus redes sociales que la protagonista de «La usurpadora» narró este desagradable momento, el cual, asegura, le sigue produciendo mucho coraje pues en ese entonces no pudo hacer nada.
«Hoy me acordé de una historia de ‘bullying’ en un proyecto que filmé hace 10 años. Dos actores muy famosos. Me volvió a dar mucho coraje. Si pasara hoy, definitivamente los hubiera acusado. Aclaro: ‘bullying’, no acoso», inició su relato.
En un segundo mensaje, Echeverría reveló el nombre de los famosos que la violentaron y se tratan de Aaron Taylor-Johnson, conocido por su papel de Quicksilver en la película de Marvel, «Avengers: la era de Ultrón», y Taylor Kitsch, quien interpretó a Gambito en la cinta «X-men Orígenes: Wolverine».
«Hace 10 años filmando #Savages me tocó una escena con Aaron Taylor-Johnson y Taylor Kitsch. Veníamos en una camioneta (yo supuestamente secuestrada con las manos y los pies atados en la cajuela). Pues les pareció muy chistoso entre tomas arrancar la camioneta durísimo», agregó.
Esto provocó que Sandra se golpeara en repetidas ocasiones y por poco saliera volando del vehículo, ya que al encontrarse inmóvil no podía sostenerse de ningún lugar. Incluso, recordó que su padre, que también estaba presente en la filmación, tuvo que aguantarse para no reclamarles a los jóvenes, ya que el futuro de su hija en la industria podría verse afectado.
La actriz confesó que ella tampoco dijo nada por miedo a las represalias en su contra, pues ellos ya eran famosos, mientras que ella era una latina intentando hacerse de un nombre. También reconoció que, más tarde, Aaron le ofreció disculpas, pero cuestionó el hecho de que por ser famosos algunos actores se sientan con el poder de hacer lo que quieran.
«Decidí no decir nada y aguantarme, pero los odié. Dos adolescentes, soberbios, famosos fueron capaces de hacer eso. Después, en la premier, Aaron llegó a disculparse. Por lo menos él sí parecía sentirse mal. A Taylor le valió madre. ¿Eso te da el poder de Hollywood? No lo sé», finalizó.
Varios usuarios respondieron a la historia de Sandra, algunos de ellos le enviaron varias muestras de apoyo; mientras que otros aseguraron que esta es una conducta recurrente en Taylor-Johnson, ya que también fue señalado por la actriz Chloë Grace Moretz de hacerla sentir mal cuando trabajaron juntos.