La depresión tropical «Florence», que ha dejado 33 muertos a su paso como huracán y tormenta por la costa sureste de Estados Unidos, se degradó este martes a baja presión, pero continúa arrojando intensas lluvias en varios estados del norte de las zonas atlánticas, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés).

El sistema postropical, que sigue arrojando intensas lluvias mientras se desplaza hacia el este, se encuentra a 170 kilómetros al oeste-noroeste de Nueva York y a 165 kilómetros al norte-noroeste de Filadelfia, Pensilvania.

«Florence» presenta vientos máximos sostenidos de 35 kilómetros por hora y se desplaza hacia el este con una velocidad de traslación de 20 kilómetros por hora, indicó el NHC en su boletín más reciente.

Hasta el momento, se han levantados todos los avisos y vigilancia de inundaciones repentinas en las zonas costeras, pero se mantiene una vigilancia de inundación repentina desde Maryland y el norte de Virginia hasta el sur de Nueva York y hacia el este hasta partes del sur de Nueva Inglaterra.

Los meteorólogos prevén que el sistema sea absorbido por otro frente de baja presión el próximo jueves y se transforme en un fenómeno extratropical a medida que acelera su desplazamiento hacia el este-sureste.

La tormenta llegó el pasado viernes a la costa sureste de Estados Unidos como huracán de categoría 1 y se degradó progresivamente hasta convertirse este domingo en depresión tropical y ahora en una baja presión.

El número de muertes relacionadas con los vientos, las intensas lluvias e inundaciones que acompañaron a «Florence» en su paso por la costa sureste estadounidense aumentó a 33, informaron este martes medios locales citando fuentes oficiales.

De los 33 muertos, 26 decesos se registraron en Carolina del Norte, otros seis en Carolina del Sur y una más en Virginia.

Entre las causas de los fallecimientos hay diversos por ahogamiento en aguas, accidentes de tráfico o muertes por caídas de árboles sobre viviendas, circunstancia en la que murieron dos niños en incidentes separados.

Mientras, la depresión tropical «Joyce», que se desplazó desorganizada por el sur del Atlántico, continúa su movimiento sur-sureste alejándose de las Azores.

«Joyce», que es la décima tormenta tropical de la temporada de huracanes en el Atlántico, presenta vientos máximos sostenidos de 55 kilómetros por hora y se encuentra a 570 kilómetros al sur de las Azores.

La tormenta se desplaza lentamente hacia el sur-sureste con una velocidad de traslación de 9 kilómetros por hora.

Los meteorólogos prevén que «Joyce» experimentará pronto un giro hacia el sur para luego enfilar el miércoles y jueves hacia suroeste.

Se espera que dicha depresión tropical se convertirá en un remanente de baja presión esta tarde o noche.