Un taxista se inmoló y murió hoy en protesta por la incursión en el mercado de Corea del Sur de un servicio de transportación operado por la filial de una empresa de tecnología de la información.
Choi, de 57 años de edad, roció sus ropas con un líquido inflamable y se prendió fuego mientras estaba dentro de su vehículo frente a la Asamblea Legislativa surcoreana. Pese a los esfuerzos de los servicios de emergencia, murió.
Decenas de taxistas se habían dado cita en ese lugar para protestar por el servicio que funciona en plan de pruebas desde el pasado viernes y previsto para su inicio formal el 17 de este mes, señaló un despacho de la agencia Yonhap.
Kakao T Carpool es una filial de Kakao, una empresa de tecnologías de la información que comenzó a operar en 1995 bajo el nombre de Daum Communications Corporation.
A la fecha opera varias plataformas, entre ellas de música, para realizar pagos, de juegos, de inteligencia artificial, de inversión y desde agosto de 2017, de movilidad para servicios de taxi, conductor designado, estacionamiento y ubicación.
Se conecta a conductores de autos privados con usuarios de transporte en las horas de mayor demanda, cuando los servicios públicos son rebasados por la demanda, argumenta Kakao Mobility.
Sin embargo, los taxistas surcoreanos señalan que servicios de ese tipo serían la muerte para su industria. Un reporte de The Korean Times indica que el costo inicial por dos kilómetros de recorrido es de 70 a 80 por ciento más bajo que el de los taxis.
La actual legislación surcoreana prohíbe ese tipo de servicios, sin embargo señala que podrán operar en las horas de mayor demanda, lo que ha servido de respaldo a Kakao Mobility.