En días pasados, Lorenzo Córdova, consejero presidente del INE, puso el dedo en la llaga y alertó en un foro de la Asociación de Organizaciones Electorales Europeas sobre la crisis que atraviesan las democracias en el mundo y como ciertas personas en el poder atentan y boicotean la organización de unas elecciones libres, justas, competitivas, imparciales y sobre todo organizadas con todo el profesionalismo. México atraviesa una guerra intestina que desembocará en una reforma electoral que, cuentan, beneficiará a una sola persona.