El número de fallecidos en los graves incendios que arrasan desde ayer la costa al noreste de Atenas aumentó a 49, mientras que hasta ahora se han contabilizado 156 heridos, según los últimos datos de Protección Civil.
Una de las víctimas más jóvenes sería un bebé de seis meses que habría muerto debido a la inhalación de humo.
Mientras que, 11 de las personas lesionados se encuentran en estado crítico y se teme que el número de muertos sea mayor, ya que se están recibiendo numerosas llamadas de personas que informan de familiares desaparecidos.
Todas las víctimas fueron encontradas en el área comprendida entre el Puerto de Rafina, a unos 30 kilómetros de Atenas, y Nea Makri, situada unos diez kilómetros más al norte.
La mayoría de las personas fallecidas quedaron atrapadas por las llamas en sus casas o en sus automóviles, o intentaron huir del fuego lanzándose al mar, pero acabaron ahogándose.
Nikos Economopoulos, presidente de la Cruz Roja griega, señaló en declaraciones a la cadena pública de televisión ERT que tras haber hallado ayer 24 muertos en distintos puntos de la zona, los bomberos encontraron esta mañana 25 cuerpos -en un principio se había informado de 26- en un campo situado en la pequeña localidad de Mati.
Según indicó una portavoz del cuerpo de bomberos, entre las víctimas hay varios niños.
La zona afectada no sólo es lugar de residencia de muchas personas que se desplazan a diario a Atenas, sino también destino de fin de semana y de veraneo de los atenienses.
Las tareas de extinción continuaron durante toda la noche del lunes, pero se vieron dificultadas por los fuertes vientos que alcanzaron fuerza 7 en la escala de Beaufort.
En total se han registrado en las últimas 24 horas, 47 incendios forestales y más de 70 urbanos en toda Grecia.
En ese entonces, era imposible estimar la magnitud del desastre. «Estamos lidiando con algo totalmente asimétrico», dijo el Primer Ministro griego, Alexis Tsipras, luego de que regresó de manera anticipada de una visita a Bosnia.
Después de que las autoridades declararan el estado de emergencia y solicitaran ayuda internacional, el portavoz del Gobierno, Dimitris Tzanakópulos, anunció que hoy llegarán aviones de extinción desde España.
Mientras tanto, el Gobierno de Chipre envió hoy un operativo de 60 bomberos para colaborar en las labores de control y extinción. El equipo incluye también cuatro enfermeros,
«Estamos en continuo contacto con el Gobierno griego para prestar asistencia en la extinción de los grandes incendios en Ática. Inmediata disposición de 60 bomberos y miembros de la defensa civil», comunicó el Presidente chipriota, Nikos Anastasiades, a través de su cuenta de Twitter.
En estos momentos, en los tres principales frentes: el este de Ática, la zona de Kineta, en el oeste de esa región, así como en Corinto y Creta, hay desplegados seis helicópteros y tres aviones, así como centenares de bomberos con medios terrestres.
Según informó el Alcalde de Rafina, Evánguelos Burnús, al menos 500 casas y 200 vehículos han sido dañados en mayor o menor medida por las llamas.