La primera ministra británica Theresa May se encamina este jueves a Bruselas para conseguir garantías con los líderes europeos para salvar su plan de la salda de la Unión Europea (UE), luego de que anoche sobrevivió la moción de censura de los diputados de su propio partido.
May ganó la batalla al obtener anoche 200 votos a favor y 117 en contra, pero enfrenta el desafío de ganar el voto en el parlamento sobre el acuerdo de salida de la UE negociado con Bruselas.
La primera ministra carece de mayoría para pasar el plan de salida de la UE y esta semana decidió posponer el voto programado para el martes ante el reconocimiento de que el acuerdo sería rechazado.
Expertos en política como la académica Meg Russell señalan que ante la falta de consenso las voces para aplazar el mecanismo de salida -artículo 50- son cada vez más fuertes.
“Una de las cosas que vamos a escuchar cada vez más son los argumentos para revocar o extender el artículo 50 y el primer ministro de Irlanda Leo Varadkar ya se pronunció en favor de hacer una u otra cosa”.
La autora del libro “La mecánica de otro referéndum sobre el Brexit” señaló que retirar el artículo 50 se puede hacer de manera unilateral, mientras que extenderlo requiere de la aprobación de los otros 27 países de la mancomunidad.
Otra de las opciones es salirse de la UE sin acuerdo “un escenario caótico que nadie quiere”, aseguró la académica.
Entretanto, el experto en política de la Universidad Queen Mary, Tim Bale, señaló a Notimex que May salió fortalecida de la votación de anoche pero no resuelve el tema de la falta de consenso hacia el Brexit.
En cuanto a salirse sin acuerdo de la UE, el académico aseguró que sería muy dañino para el país.
“Creo que sería tan profundamente dañino para el país y para cualquier gobierno que supervise esa salida sin acuerdo que los riesgos de que suceda, aunque están presentes, son muy remotos”, consideró Bale.
Se espera que Reino Unido abandone la Unión Europea el 29 de marzo de 2019.
Sin embargo, para abandonar de manera ordenada el bloque se requiere de la aprobación del dividido parlamento británico que en repetidas ocasiones ha dicho que no aprobará el actual plan de salida.
May busca encontrar garantías en Bruselas en torno a la frontera irlandesa para tratar de convencer a los parlamentarios de que el actual plan es el mejor para Reino Unidos.