Tras la muerte de Armando Vega Gil, Botellita de Jerez se disolvió, informó Paola Hernández, representante de la banda.
«Botellita se acaba hoy (lunes) y cada uno seguirá con proyectos personales, tal vez hagan cosas juntos, pero nunca más como Botellita», informó Hernández durante el velorio de Vega Gil, en la colonia Roma.
Los músicos Francisco Barrios «El Mastuerzo», González y Santiago Ojeda no dieron declaraciones al respecto.
«Se va a hacer todo lo necesario para homenajear a nuestro carnal», dijo Barrios, escuetamente.
Horas antes de quitarse la vida, Armando Vega Gil estaba aterrado por las repercusiones que sobre su carrera como músico y escritor tendría la acusación de acoso sexual emitida de manera en su contra en la cuenta @metoomusicamx.
La hacía, presuntamente, una mujer que afirmaba que al momento del episodio ella tenía 13 años.
«Aunque se supiera la verdad, se aclarara incluso penalmente, ya me hicieron polvo, ya no tengo credibilidad», dijo en un mensaje de audio Vega Gil al productor y guionista Víctor Salcido.
«La mayoría de las cosas que hago (como autor) son para niños y adolescentes, entonces me voy a quedar sin trabajo. Tarde o temprano la gente va a ir abandonándome», agregó.
El suicidio del bajista de 64 años sacudió el lunes a México, luego de ser confirmado por la banda Botellita de Jerez, que él fundó en los 80.
Los internautas se dividieron entre quienes pedían que no se cargara al movimiento #MeToo la muerte de Armando, y quienes condenaban el señalamiento anónimo y sin pruebas al artista conocido como «El Cucurrucucú».
Vega Gil, cuyo cuerpo fue velado anoche en una funeraria de la Colonia Roma, había subido una carta a su Twitter en la que anunciaba lo que haría.
Además, allí negaba ser responsable de acoso y abuso, y subrayaba que en su trayectoria había defendido los derechos de los niños.
«Mi vida está detenida, no hay salida», escribió el músico, quien dejó huérfano al pequeño Andrés, de 8 años.
Tras el anunció de Botellita de Jerez, la cuenta @metoomusicamx desapareció por horas de la red; cuando se reactivó, sus administradores acusaron un hackeo como intento de censura.
«El suicidio de Armando Vega Gil es responsabilidad de Armando Vega Gil», se señaló desde allí.
Santiago Ojeda, guitarrista de Botellita de Jerez, quien recordó a su amigo y colega como un tipo brillante, talentoso y lleno de humor, dijo desconocer quién pudo emitir la denuncia contra Vega Gil.
«Lo que él sintió fue que no importaba si fue real o no la acusación, a él le preocupaban las reacciones y credibilidad. Se empezó a paniquear», comentó.
La acusación inicial encontró ayer un respaldo, horas después de la muerte del rockero, por parte de la escritora Martha Mega.
«A mí también me hizo invitaciones sexuales cuando tenía 14-15 años. Ahí hay una verdad, al menos», tuiteó.
Amigos de Vega Gil se dijeron sumamente dolidos por la pérdida del egresado de la Escuela Nacional de Antropología e Historia.
«Era un ser hiper sensible, muy puro, incapaz de hacer daño. Al menos ese es el Armando con el que me tocó convivir», expresó la escritora Beatriz Rivas.
«Estoy triste con Armando y enojado con Armando, no sé si era la mejor salida, creo que no era lo mejor lo que pudo haber hecho. Me tiene muy triste, sacado de onda», comentó Marcello Lara, de Moderatto.