El rector de la UNAM, Enrique Graue Wiechers, atestiguó la firma de convenios de colaboración entre el Tribunal Universitario y 11 universidades públicas del país, para realizar actividades académicas conjuntas de prevención de la violencia y políticas contra la discriminación.
“Sigamos en este derrotero, procurando la mejor justicia y el trabajo armónico de nuestras comunidades”, subrayó el rector, en el acto a distancia.
Previamente, el Abogado General de la Universidad Nacional, Alfredo Sánchez Castañeda, expuso que entre los principales puntos que se establecen en los convenios están la prevención y la erradicación de la violencia en las universidades, y el establecimiento de políticas para prevenir la discriminación. Además, se tiene previsto realizar seminarios, conferencias e investigaciones conjuntas.
Agregó que el Estatuto General de la UNAM señala que los universitarios se deben respeto entre sí, por lo que no hay espacio para ningún tipo de violencia, incluyendo la de género. Este ordenamiento ha sido reformado para establecer que la violencia de género es causa grave de responsabilidad; además para que el Tribunal Universitario esté conformado con paridad y se juzgue con perspectiva de género.
“No cabe duda que la UNAM y todas las universidades aquí reunidas tienen la firme voluntad de erradicar la violencia de género”, sostuvo Sánchez Castañeda.
En tanto, el presidente del Tribunal Universitario, Eduardo López Betancourt, coincidió en que los acuerdos muestran el compromiso por erradicarla en las instituciones de educación superior y sean espacios de libertad para el aprendizaje.
Ante la integrante del Tribunal Universitario y decana del Consejo Interno del Instituto de Investigaciones Jurídicas, María Patricia Kurczyn Villalobos; y el coordinador del Programa Universitario de Derechos Humanos, Luis Raúl González Pérez; López Betancourt propuso que en este año se realice un congreso de tribunales universitarios cuyo objetivo sería analizar las reglamentaciones que existen en las instituciones y demás acciones necesarias para que sus comunidades se sientan seguras y sean centros de adecuado desarrollo personal.
A nombre de las universidades firmantes, José Alfonso Esparza Ortiz, rector de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, indicó: estos acuerdos implican la suma de esfuerzos “en los campos de justicia, inclusión, equidad, igualdad y perspectiva de género, así como para prevenir la discriminación, el acoso y la violencia”.
Todos estos temas sensibles requieren atención prioritaria y que las instituciones de educación superior tengan posturas claras; mientras que el apoyo de tribunales universitarios les permitirá contar con protocolos para prevenir la violencia y marcos regulatorios sobre las sanciones.
La educación universitaria, recalcó, debe resultar en profesionistas competentes, “pero también en ciudadanos responsables y seres humanos empáticos, respetuosos, tolerantes, que sean agentes de transformación en la sociedad”.
En la firma participaron los rectores: Daniel Octavio Valdez Delgadillo, de la Universidad Autónoma de Baja California; Juan Ignacio Camargo Nassar, de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez; José Román Ruiz Carrillo, de la Universidad Autónoma de Campeche; Luis Alberto Fierro Ramírez, de la Universidad Autónoma de Chihuahua; y Christian Torres Ortiz Zermeño, de la Universidad de Colima.
Asimismo, los rectores de la Universidad Autónoma de Guerrero, José Alfredo Romero Olea; de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, Raúl Cárdenas Navarro; y de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco, Guillermo Narváez Osorio. Además, el secretario General de la Universidad Autónoma de Aguascalientes, Jesús González Hernández; y el encargado del Despacho de la oficina del Abogado General de la Universidad Autónoma del Estado de México, Iván Octavio Rojas Delgado.