El Grupo Integral de Derechos Humanos (GIDH) «Lex-magister» hizo un llamado contundente al titular del poder Ejecutivo, Andrés Manuel López Obrador, y a la Secretaría de Educación Pública (SEP), Leticia Ramírez Amaya, para que atiendan de manera urgente las decisiones del Poder Judicial y las demandas de diversos sectores de la sociedad sobre el proceso de creación y distribución de los libros de texto gratuitos.

Su presidente, Jesús Rey Fierro Hernández, subrayó que el GIDH «Lex-magister» ha estado vigilante desde mayo pasado, cuando se alertó sobre la necesidad de asegurar la adecuada ejecución de los procedimientos establecidos para la confección del material educativo destinado al ciclo escolar 2023-2024.

«Además, hay opacidad por parte del gobierno federal para informar sobre quiénes participaron y cómo se llevó a cabo el proceso, y frente al incumplimiento de lo exigido por la ley para elaborar y modificar las obras de enseñanza», enfatizó el doctor en derecho.

Fierro Hernández, reconocido con el Premio Nacional de Derechos Humanos (2017) puntualizó su llamado a la apertura de un nuevo proceso, donde se involucre –de manera efectiva– a los padres de familia, docentes y especialistas en educación, así como de la pedagogía, conforme lo establecen las normativas vigentes.

«La educación es de vital importancia y los libros de textos son primordiales», subrayó Fierro Hernández, al resaltar la necesidad de que los contenidos se adapten a criterios pedagógicos y métodos de enseñanza que garanticen un aprendizaje eficaz para niñas, niños y jóvenes en todo el país y con una perspectiva de derechos humanos.

Reiteró que la actualización de los libros de texto debe llevarse a cabo con responsabilidad y la colaboración de expertos y científicos, siguiendo rigurosamente el debido proceso para asegurar un desarrollo integral y adecuado de la niñez y la adolescencia, tal y como establece la Declaración Universal de los Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Frente a este escenario, el GIDH «Lex-magister» subrayó el incumplimiento de los requisitos legales para crear y modificar el contenido de los libros de enseñanza, “y como resultado, tenemos un bodrio”; no se puede permitir que desde el Estado mexicano se impulse una educación de muy mala calidad en perjuicio de los derechos de la niñez mexicana”.

“Por este motivo es prioridad que se reintegre el proceso de elaboración con la participación activa de padres de familia, docentes y especialistas, tal y como lo dicta el marco legal vigente. La educación, es un pilar fundamental para el presente y futuro del país, y los libros de texto desempeñan un papel crucial en esta misión, incluso para su posterior postura para defender sus propias garantías individuales”, expuso.

“La actualización de los libros de texto se convierte en una tarea de gran envergadura para las autoridades educativas. Es una responsabilidad el de asegurar el desarrollo integral de la niñez y la adolescencia. En este contexto, es imperativo que, ante tal situación, la educación se eleve a una categoría de prioridad nacional”, enfatizó.

Las autoridades están obligadas a reafirmar su compromiso con una educación de calidad, que fomente el pensamiento crítico y empodere a las futuras generaciones. El proceso de creación de libros de texto es un eslabón clave en esta cadena de conocimiento y formación.