Ismael Pérez Herrera cirujano plástico y reconstructivo de la UMAE del Hospital de Traumatología y Ortopedia del Instituto Mexicano del Seguro Social informo que la enfermedad de Quervain se presenta más en mujeres madres de familia y va en aumento en los adolescentes, padecimiento que se manifiesta por un dolor e inflamación en la mano, en la muñeca, entumecimiento en dedos pulgar e índice y rigidez en el dedo pulgar, en este último grupo puede relacionarse por el uso excesivo de dispositivos móviles.

El mantener la mano en una sola posición, realizar movimientos repetitivos con los dedos, cargar cosas pesadas con regularidad, son parte de las afecciones que causan la enfermedad. En algunos casos se presenta como un abultamiento que sale en el hueso de la muñeca del lado donde se encuentra el pulgar.

El especialista explicó que en el dorso de la mano, es decir la muñeca, los tendones tienen como abrazaderas que ubican cada tendón en su sitio, el primer compartimento es el que maneja a dos tendones que le dan movimiento al dedo pulgar y son los que resultan afectarse e inflamarse, y al ser el dedo con mayor movimiento se reciente más el dolor e impide realizar ciertas actividades

Otro de los grupos en los que se presenta este padecimiento, son mujeres embarazadas o las que tienen hijos pequeños y que tienen que cargar constantemente y derivado del peso ocasiona el dolor en las muñecas. Por otro lado se encuentran los trabajadores de la construcción, obreros, cargadores, empacadores, es decir donde utilizan mucho las manos y sobre todo con peso, así se refirió el cirujano plástico y reconstructivo del Seguro Social.

Pérez Herrera expresó que el inicio de un tratamiento para la enfermedad de Quervain es de acuerdo al grado, desde un tratamiento conservador que consiste en antibióticos y analgésicos antiinflamatorios, terapia física hasta una cirugía, en el caso de ser exitosos los tratamientos anteriores

Por último, explicó que si la afección continúa demasiado tiempo sin recibir tratamiento, el dolor puede extenderse aún más en el pulgar, volver al antebrazo o ambas cosas.