Sin arrumbar nuestras diferencias históricas, los partidos de oposición vamos a unirnos para fortalecer la experiencia que hemos tenido en la Cámara de Diputados: enfrentar el regreso del autoritarismo, del centralismo y de las decisiones en el hombre único, sostiene la coordinadora de la bancada del PRD, Verónica Juárez Piña.

“El legislador número uno está en Palacio Nacional, y los diputados y diputadas de Morena y sus aliados van solamente a concretar lo que se les ha indicado. Por eso es muy importante, presentarnos ahora como un contrapeso que nos permita hacer mayoría en la Cámara de Diputados”, afirma en referencia a la coalición Va por México que su partido formalizó este jueves con PAN y PRI en 171 distritos electorales.

Para la coordinadora de los perredistas en el Palacio Legislativo de San Lázaro, la pretensión de volver al partido hegemónico tiene consecuencias graves en la eliminación de programas que daban atención a niñas, niños y adolescentes y a mujeres.

“A pesar que había compromisos por parte del coordinador parlamentario, en ese momento era Mario Delgado, de detener la extinción de los fideicomisos, al final prevaleció la opinión del Presidente”, ejemplifica.

La legisladora por Jalisco sostiene, en entrevista con Excélsior, que al privar la visión de un solo hombre en el reparto presupuestal se castiga a estados y municipios, pero también a la educación y a la salud.

Política de izquierda desde sus años universitarios cuando fue líder estudiantil en la UdeG, Juárez Piña confía en que este bloque partidista que ya se ha manifestado en el Congreso se convierta en un frente social que, en la segunda parte del sexenio, pueda poner freno al debilitamiento de las instituciones, a los ataques a órganos autónomos como el INE y las vulneraciones al Estado laico que, según su opinión, se expresan en el manejo de la llamada Guía Moral y en el otorgamiento de tiempos oficiales a las iglesias.

Esta coalición electoral representa una opción contra el régimen que quieren restaurar”, señala.

Protagonista clave del estira y afloja que se da en la Junta de Coordinación Política (Jucopo) entre Morena y sus aliados y el dique opositor, la perredista considera que, a nivel parlamentario, deberá ser prioridad la reorientación de los recursos frente a los efectos de la pandemia, tanto en la vacunación en general y contra el covid como en la atención hospitalaria y de diversas enfermedades, así como en los planos de la seguridad y el económico.

Asegura Verónica Juárez que su bancada continuará insistiendo en la necesidad de un ingreso mínimo vital, al tiempo que respaldará una regulación en materia de mariguana que responda a la despenalización que la Suprema Corte instruyó, y presentará iniciativas que garanticen la paridad en gubernaturas, el matrimonio igualitario, el respeto a las minorías partidistas y el fin a la sobrerrepresentación que ha prevalecido en la actual Legislatura en favor de la mayoría morenista, así como una propuesta en contra de que los delegados estatales se conviertan en candidatos a gobernadores.

Única mujer coordinadora de fracción en San Lázaro, la política de oposición expone que, en la inédita campaña que se avecina, por las restricciones que la pandemia impone y el uso clientelar de los apoyos gubernamentales, la coalición Va por México deberá contar con las y los líderes con representación y reconocimiento en los territorios en disputa y plantear propuestas concretas a los problemas de la vida diaria de los ciudadanos.

“Es cierto que tenemos un Presidente carismático, en campaña electoral siempre, con altos niveles de aprobación. Pero cuando revisamos los temas como la seguridad, está reprobado por la ciudadanía. Así que no necesitamos a alguien popular, sino alguien que resuelva”, sostiene.

Al reseñar el único encuentro que los coordinadores parlamentarios han tenido con el presidente López Obrador, en febrero anterior, la diputada federal cuenta haberle expresado que además de la importancia tiene la agenda del Ejecutivo, para la democracia resulta fundamental atender las propuestas legislativas del resto de los grupos porque éstas representan ideas, visiones, necesidades de toda la sociedad.

“Y nos respondió, ‘bueno, yo también creo que es importante. Eso ustedes lo resolverán. Sólo les voy a pedir una cosa: que esos cambios que hagan no signifiquen presupuesto, porque no hay dinero’”, narra.

Lamenta la legisladora feminista que esa conversación en Palacio Nacional no hubiera sido el inicio de un diálogo republicano entre los poderes para construir acuerdos y soluciones a problemas nacionales.

“Pienso que todavía no es tarde para que el Presidente nos convoque como representantes del Congreso y a los gobernadores para ver cómo enfrentamos las consecuencias de la pandemia.

“A mí me gustaría que eso ocurriera con cualquier mandatario en la actual circunstancia. Y vamos a seguir insistiendo. Ésa es la clave: insistir, insistir, insistir, sin desaprovechar un solo espacio para hacernos escuchar, estar dispuestos a la reflexión, a escuchar, a dar el debate y a construir acuerdos”, concluye.

EXCÉLSIOR