Eros Ramazzotti volvió a la Ciudad de México luego del parón provocado por la pandemia de Covid 19 que le impidió dar los conciertos programados y que finalizarán el 9 de diciembre en Sao Paulo, Brasil.

El éxito y la influencia que Ramazzotti tiene en la escena musical internacional, junto a compatriotas como Laura Pausini, es innegable; sin embargo, en la fecha que ofreció la noche de este miércoles en la Arena CDMX, no logró que el lugar se llenara, luciendo incluso a un 50% de su capacidad.

Y es que la Arena, no es un lugar sencillo de llenar, en principio por su gran capacidad para más de 22 mil personas, después quizás por los precios de las entradas, que van desde el más cercano que ronda los 3 mil pesos hasta el más barato de 500 pesos con una vista ya muy lejana al escenario.

Otro factor probablemente sea la lejanía del recinto y el día de la semana en la que se realizó, pues en colindancia con Tlalnepantla, la Arena CDMX es uno de los lugares menos céntricos de la capital.

Sin embargo, aunque no en su máxima capacidad, los asistentes, que si rebasaban los más de 10 mil, cantidad que no es menor pues equivale a un Auditorio Nacional. Corearon, aplaudieron y brincaron con cada uno de los éxitos de Ramazzotti.

El italiano, cantó en su lengua madre muchos de los temas, y otros más en español, como en un principio, dejó en claro, sería la dinámica.

Sus músicos deleitaron a los melómanos, con solos de batería, guitarra y hasta de saxofón.

Una noche para disfrutar, con éxitos ochenteros, y baladas tranquilas que obligaban a abrazar a tu acompañante, así se despidió Ramazzotti «Gracias México City», para continuar su paso por América desde Panamá, Santiago, Buenos Aires, y hasta Brasil.

El Universal
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