Remember, remember the fifth of november

(Guy Fawkes)

La Revista 360 Grados Instrucciones para vivir en Puebla cumple hoy 13 años de existencia, pese a todo y pese a todos. Es un gusto y un orgullo decirle a nuestros colaboradores, clientes, aliados, amigos y, sobre todo, a nuestros lectores -porque por ellos existimos: ¡Gracias totales!

Les debo confesar algo: llevar una revista no es una tarea fácil. Nada fácil. Me he encontrado en todo este tiempo mucha gente que ha querido poner una publicación de esta naturaleza, pero lamentablemente pocos sobreviven y es lamentable porque la revista es un medio de información y entretenimiento que tiene mucho tiempo de duración. Cuando una publicación es buena se guarda en el librero, cuando ya perdió su ciclo va a la basura y de ahí al reciclado.

Las buenas revistas siempre se guardan.

En estos tiempos que abundan los portales de noticias, una revista era, es y siempre será un artículo de lujo. No estamos contra la era digital, pues más bien hemos ido aprendiendo a subirnos a la nube. No estamos anunciando que el impreso desaparece, no se emocionen, más bien anunciamos que alimentamos ambos sistemas de información porque son públicos distintos. El internet llega a más gente y el impreso a un grupo más interesado en la lectura y en contenidos que lo alimenten.

Lamentablemente, en este año muchos medios impresos han desaparecido. La crisis económica y sanitaria que vivimos nos ha obligado a repensar cómo seguir adelante, cómo llegar a un público mayor, cómo impactar en un ambiente cargado de memes, cómo competir con los youtubers y los ahora llamados influencers que antes se les conocía como líderes de opinión.

Insistimos que no estamos peleados con ningún tipo de plataformas, de todas aprendemos y estamos compitiendo para no rezagarnos, pues la meta es renovarse para nunca morir. Llevar una revista no es un arte de magia, se cometen errores, muchos, muchísimos, aunque también tenemos muchos aciertos.

No solo es un tipo loco que se pone a escribir y eso lo envía a unos diseñadores y de ahí a la imprenta. No, para nada. Aquí hay un proceso de planeación, de creatividad, de elaboración que tiene que ver con escribir, fotografiar, diseñar, editar, corregir y elaborar estrategias, sin soslayar los aspectos contables porque hay que pagar impuestos, de ventas, de estar atento a las tendencias, de pagar nóminas, de pagar la distribución.

De buscar estrategias basadas en una misión y en una visión como empresa.

No es una persona tocando todos los instrumentos a la vez, pues son muchos músicos que tienen la función de agradar a sus lectores y a los clientes con buenos contenidos.

En estos trece años ha pasado de todo: cosas muy, pero muy buenas y, también hay que admitirlo públicamente, muchos yerros. Sería muy soberbio de mi parte decir que todo ha sido miel sobre hojuelas porque no es así.

Se ha ganado y se ha perdido.

Se ha apostado bien y a veces no tanto.

Quien diga que es un hombre exitoso y que jamás se ha caído es un gran mentiroso porque los golpes siempre terminan de formar tanto en lo personal como en lo profesional.

¿Hay planes para el futuro?

Sí, los hay, pero más adelante les comentaremos de qué van y cómo van porque estamos en la elaboración de temas de interés general. Sí habrá cambios y buenas noticias para nuestros seguidores y quienes confían en nosotros.

Llegar a los trece años es estar terminando la primaria y entrar a secundaria. Lo que sí les puedo apostar es que este año con tantas convulsiones políticas, sanitarias y económicas nos obligan a ser más competitivos. Nos llevan a no confiarnos porque mantener una marca es un proceso difícil y más en un público tan exigente y disímbolo como es el poblano.

13 años por fin.

Aún recuerdo cuando planeábamos esta revista con nuestro amigo Alejandro Rodríguez y un servidor en un mes de julio del 2007. En esos tiempos en el que comenzó la turbulencia política en Puebla y aún no termina de asentarse (el caso Cacho- Marín arrancó en febrero del 2006).

Vamos por más años, mientras tanto levanto un caballito de tequila y digo: “¡salud por la Revista 360 Grados y sus infaltables instrucciones para vivir en Puebla!”.

Gracias en verdad a todos, hasta nuestros adversarios y críticos -que también los hay- porque ellos nos obligan a corregir nuestras pifias y a tratar de ser mejores.

¡Gracias totales!