Después de que Estados Unidos registró temperaturas bajas históricas durante fin de año, una tormenta de nieve se apresta a avanzar por la Costa Este estadounidense el jueves.

La peor tormenta invernal de la temporada amenaza con nieve, hielo y frío desde Nueva Escocia, Canadá, a Florida, en el sureste estadounidense.

Las advertencias y avisos de tormentas de invierno se extienden por el sur y la costa este estadounidenses, informó el Servicio Meteorológico Nacional.

Este miércoles por la madrugada se registraron nevadas en Tallahassee, la capital de Florida, informó Rob Carolan, un meteorólogo de Hometown Forecast Services Inc.

La tormenta se fortalecerá a medida que se mueve hacia el norte, cayendo hasta 30 centímetros en Boston, y 10 centímetros en Manhattan, así como 12 en Brooklyn y Queens el jueves, dijo el Servicio Meteorológico Nacional.

El fenómeno podría convertirse en una ciclogénesis explosiva, una «bomba», abreviatura de «bombogénesis», un fenómeno que se produce cuando la presión central de un sistema cae en forma abrupta -24 milibares o más- en 24 horas.

«Vamos a tener una nevada decente», dijo Carolan, refiriéndose a Nueva Inglaterra. «La mala noticia es que arruinará el tráfico de mañana por la mañana».

El clima amenaza con causar estragos en los mercados por más tiempo, ya que los precios de la electricidad ya han subido al nivel más alto en años y la demanda de gas natural alcanzó un nivel récord.

El Gobernador de Georgia, Nathan Deal, ha declarado el estado de emergencia para 28 condados.

La nevada llega luego de que Boston igualó un récord de 100 años con siete días de temperatura mínimas, que los aeropuertos de Nueva York registraron nuevos mínimos y Chicago vivió su Año Nuevo más frío de la historia.

Hay un hecho positivo: la tormenta dará cierta tregua del frío que provocó amenazas de heladas en todo el centro estadounidense y grandes tormentas invernales.

Pero el alivio será solo temporario dado que el frío ártico volverá para finales de la semana. Las temperaturas subirán algo desde Filadelfia a Boston para luego bajar nuevamente el viernes y el sábado.

«Esto es solo un tentempié, el plato principal llegará el fin de semana», dijo Judah Cohen, director de pronósticos estacionales de Atmospheric and Environmental Research, una empresa Verisk Analytics Inc. en Lexington, Massachusetts. «Es el frío más intenso que yo recuerde».