¿Qué hará Morena con Claudia Rivera Vivanco ahora en campaña?, pues en poco tiempo ha generado una pésima percepción social. La presidenta municipal necesita hacer algo y de manera urgente porque el negrito en el arroz se llama ayuntamiento de Puebla y si el PAN quiere atacar al partido de López Obrador se irá sobre su punto débil.
Inseguridad en las calles, baches, carencia de servicios como alumbrado en varias colonias, divisiones en su gobierno y en su cabildo (cinco regidores de su partido no quieren a Rivera), ambulantes que se apropiaron de las avenidas, el centro histórico es un muladar, traiciones, incumplimiento a la palabra con muchos actores políticos, inhabilidad para generar y ejercer recursos de la propia ciudad son algunas de las tantas faltas en las que ha incurrido esta nueva administración.
El colmo de los colmos es que la poderosa presidenta nacional de Morena Yeidckol Polevnsky ya se presta a enseñar a cómo gobernar a la alcaldesa de la cuarta ciudad más importante del país.
Es como cuando en la casa, escuela o en el trabajo alguna vez nos dijeron: “¿no puedes?, por eso, dime ¿no puedes? Porque sino puedes mejor dime y yo lo hago”. A muchos alguna vez en nuestra vida nos dijeron esas palabras y por dentro nos doblábamos del coraje por la impotencia que generan dichas palabras.
Claudia Rivera además de generar una mala percepción social cometió el error de sumarse a la campaña de Alejandro Armenta Mier, porque se fue en banda cuando envió a su familia a apoyar al senador que rompió la liga y generó un conflicto directo contra Fernando Manzanilla, secretario general de Gobierno.
Y ese fue un error porque ahora tendrá, no solo limpiar su imagen social sino que por fuerza debe limar asperezas con Luis Miguel Barbosa con quien está confrontado desde la campaña del año pasado.
La idea que tienen en Morena es que Claudia Rivera negoció en la sombra con Rafael Moreno Valle, Martha Erika Alonso y con el entonces gobernador Tony Gali y sus dichos se sustentan en varios morenovallistas o seguidores de Gali que colocó en puestos claves en su administración.
Se abre paréntesis: (esas acusaciones no son de este reportero sino así las replicaron los barbosistas el año pasado). Se cierra paréntesis.
El primer mensaje y bueno fue la incorporación de Rafael Quiroz Corona en el área de prensa, pero aún falta el golpe en la mesa para la operación política y que se encargue alguien de la seguridad.
Es cierto que el tema de la delincuencia ha ido creciendo poco a poco, que muchos ex alcaldes y ex titulares de la secretaría encargada de esta área son responsables, pero el problema es que ellos ya no están y por el hecho de que no lo hayan hecho bien no se debe escudar la actual administración municipal en mantener esos bajos niveles.
Debe correr a la actual secretaria de Seguridad Pública. Si sigue como Mejía Barón (guardándose los cambios) los resultados serán terribles. Debe recomponer su relación con el secretario general de Gobierno, Fernando Manzanilla.
Y antes de todo eso no estaría mal hacer un mea culpa y admitir que no se gobierna con tenis blancos, y que es un ser humano y se puede equivocar. Una vez admitido el error, dar un golpe de timón y entender que la cuarta transformación pasa por Luis Miguel Barbosa y por Fernando Manzanilla.
Debe bajarle un poco a su soberbia y dejarse ayudar, ya que el final será muy complicado si no hace algo urgente. El ayuntamiento necesita de una cirugía mayor, pues en muy poco tiempo de echó a perder todo lo que se construyó.
Foto: Es Imagen / Daniel Casas
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