Pareciera que la Semana Santa se prolongó unos días más para Roxana Luna Porquillo, quien literalmente fue crucificada por ya formar parte del equipo que hace unos años combatió.
Incluso, recibió un beso en plena rueda de prensa, donde dijo que “perdonó” cuando era su enemiga de quienes pidieron su expulsión del PRD, o sea los morenovallistas amarillos.
Y el ósculo lo recibió nada menos que de su líder estatal, Jorge Benito Cruz.
Junto con el beso, los rumores han crecido más, de que todo se trata de una estrategia para finalmente dejarla fuera, como cadáver político.
Si pierde la elección por la diputación federal al distrito 12, la carrera de Roxana, estaría sepultada y sin posibilidad de una resurrección, ni en semana Santa.
Por eso, dicen que la mandaron a un distrito muy complicado, donde competirá con Fernando Manzanilla por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y Karina Romero, hija de la ahora embajadora, Blanca Alcalá.
La situación no la tiene nada fácil Roxana, mucho menos luego de la vapuleada en todos lados, desde los medios de comunicación, hasta en redes sociales.
Por eso mismo, dichos rumores de que la mandaron para sepultarla no suenan descabellados.
Una revancha al estilo siciliano.
En este mismo espacio se lo adelantamos desde principios de este 2018, que alzar la mano de sus ex enemigos, sería lapidario.
Hay que recordar que Roxana prefirió tragarse “su rencor” por los morenovallistas, que tragarse a Luis Miguel Barbosa.
Como se lo contamos hace unas semanas, estuvo a punto de afiliarse a Morena, si el abanderado hubiera sido Enrique Cárdenas.
Pero el destino le jugó chueco.
Y todo por un pleito comprado por su padrino el senador Luis Sánchez con Barbosa.
¿Sería mejor?
¿Estará arrepentida?
Ahora no queda más que dar tiempo al tiempo.
Una clase de hacer buena política, para mantener buenas relaciones y gobernabilidad, recibió el secretario General de Gobierno, Diódoro Carrasco Altamirano, nada menos que de su jefe, el gobernador Tony Gali.
Y es que el mandatario estatal tuvo que tomar al toro por los cuernos al abrir las puertas de Casa Puebla a los líderes de la 28 de Octubre, encabezados por Rubén Sarabia, “Simitrio”.
Todo porque el también ex gobernador de Oaxaca, seguía con la inercia morenovallista de puertas cerradas.
El líder moral de la organización de comerciantes, no era recibido por un gobernador, desde hace más de 30 años, cuando inició la persecución en su contra.
Al menos no con todos los reflectores.
Diodoro, desde que es titular de la Secretaría General de Gobierno (SGG), iniciando en los últimos años del sexenio pasado, solo recibió o atendió personalmente en una ocasión a los líderes de la 28 de Octubre, siempre mandaba a sus segundones.
Notorio que la inercia del sexenio pasado no se la había quitado.
Lo malo es que la lección la recibió casi al final de la administración galista, ya que siempre prefería encerrarse en su bunker de Casa Aguayo a ver pasar el tiempo.
Durante la gira de Miguel Ángel Osorio Chong por Atlixco y Cholula, decenas de pares de ojos volteaban para todos lados en busca del candidato a gobernador, Enrique Doger Guerrero.
La pregunta más recurrente fue: ¿Y el candidato?
El abanderado no se presentó a ninguno de los dos actos organizados por el candidato a senador, Juan Carlos Lastiri.
De por sí, ya estaban creciendo mucho los rumores de un rompimiento entre los priistas.
Ya se verá en los próximos días que tan ciertos son.
La diferencia
Se supo que una activista ha recibió propuestas para ser candidata, pero muy congruente, las rechazó todas.
Se trata nada menos que de Pame Tajonar, conocida activista y periodista de temas ecológicos, quien lleva años combatiendo los ecocidios en Puebla.
Una de las invitaciones fue de parte del Partido Verde Ecologista (PVEM) para ser su abanderada a una regiduría por el ayuntamiento de Puebla.
Pero su postura fue que es y seguirá siendo una periodista ambiental y activista defensora del medio ambiente, por lo que si aceptara alguna de las propuestas, sería como traicionarse a sí misma.
Un aplauso a la fundadora del medio de comunicación Tierra Baldía, por ser congruente a sus más de 24 años como activista y 22 como periodista ambiental.
Una gran diferencia con la actual regidora Verónica Mastretta, quien se vende como la ecologista más ecologista de Puebla y sus alrededores.
Lo malo es que su paso por la regiduría ha sido totalmente gris.
En cambio, Pame es un ejemplo a seguir.