Luego de lo revelado por el mismo gobernador de Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta, de que solo tiene 600 millones de pesos para operar lo que resta del año, ha puesto a temblar a más de dos.
Y es que dicen los que saben, de este modo ha lanzado la advertencia que el brazo de la justicia no solo se irá en contra de la administración morenovallista, sino un poco más cerquita.
Así que quienes trabajaron en el breve periodo de Guillermo Pacheco Pulido, están poniendo sus barbas a remojar.
Se dice en los corrillos políticos que más de dos vieron la oportunidad de su vida y al pensar que serían protegidos por el siguiente gobierno, devastaron las arcas.
Pero es claro que no habrá protección y el tema de la guerra contra la corrupción, acorde al discurso de la 4T va en serio.
Empezarán las filas en los juzgados federales en busca de amparos y no solo de morenovallistas.
¡Agárrese quien pueda!
El boiler
Hace unos días quien fuera el secretario técnico de la Comisión de Derechos Humanos (CDH) de Puebla, José Víctor Juárez Vázquez, fue detenido por elementos de la Policía Ministerial.
Dicho personaje fue uno de las decenas de despedidos de dicho organismo en tiempos de Adolfo López Badillo, por no comulgar con su trabajo.
Ahora es activista representante del Colectivo Especializado en Derechos Humanos (CEDAC)
Lo increíble del caso, es que su aprehensión se debió a una denuncia por el supuesto robo de un boiler en 2015.
La denuncia se la interpuso el conocido político y ex candidato a presidente municipal de San Pedro Cholula, Julio Lorenzini, con quien trae una añeja disputa.
Y es que Víctor Juárez al ser vecino del hotel del político, se ha dado cuenta y denunciado diversas irregularidades.
Incluso lo denunció a Lorenzini por la construcción de un añadido al hotel sin los permisos del ayuntamiento y mucho menos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), al estar en el polígono de la Gran Pirámide.
La denuncia llegó incluso a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
El INAH días después clausuró.
La respuesta fue denunciar al activista en 2016 por el robo de un boiler.
Pero no prosperó por falta de elementos, ya que solo contaba como prueba a dos supuestos testigos, por lo que se archivó la averiguación previa tres años.
Sin embargo, de repente se activó, cuando ya nadie se acordaba.
La activa no solo la Fiscalía General del estado, sino también el Tribunal Superior de Justicia, ya que un juez es quien debió girar la orden.
Después de la aprehensión, el ex panista hizo un video que publicó en sus redes sociales afuera justo de la casa del activista, claro sin mencionar nombres.
“Se hizo justicia en Cholula, se logró la detención de responsable”, dijo al acusar:
“Fui víctima de un delito, hoy se detuvo al responsable, quien vivía aquí”, dijo al estar afuera de su casa.
“Se ocultaba en una piel de oveja y se camuflajeaba (sic) como muchos delincuentes lo hacen para pasar desapercibido”, dice al acusar que el detenido era operador de un magistrado del poder judicial, lo que aprovechó para no ser procesado, aseveró.
Víctor Juárez, salió luego de ser ingresado al Centro de Reinserción Social (Cereso) de Cholula, tras el pago de una fianza superior a los 40 mil pesos, luego de que lograron bajarla de más de cien mil pesos que solicitó el juez.
Pero el proceso sigue.
Inmediatamente el CEDAC en sus redes sociales reprobó la acción que pareciera de tiempos del morenovallismo.
¡Y todo por un boiler!