México debe recuperar el valor de la unidad y defender la dignidad humana: Emilio José Baños Ardavín

Emilio José Baños Ardavín, Rector de la UPAEP, rinde su Informe de Actividades, correspondiente al periodo 2020-2021, en las nuevas instalaciones de la Prepa Angelópolis.

En la actual coyuntura que vivimos como nación, desde nuestra perspectiva hay dos desafíos clave: recuperar el valor de la unidad, y defender la dignidad humana, en especial la de los más vulnerables, aseveró Emilio José Baños Ardavín, rector de la UPAEP, al rendir su Informe de Actividades 2020-2021.

Ante la presencia de miembros de la Junta de Gobierno de la universidad e invitados de los diferentes sectores de la sociedad, señaló, … “Unidad no es lo mismo que uniformidad; la unidad se construye respetando y valorando al otro, apreciando y contrastando las ideas, y reconociendo la capacidad de razonar para entender la realidad como fundamento para la superación de los conflictos y la generación de acuerdos”.

El rector de la UPAEP, manifestó que sin duda es una tarea ardua que compete a todos los actores, y especialmente a los gobernantes. Agregó que, ante la complejidad de nuestra historia y nuestros ingentes retos sociales, es entendible que la construcción de la unidad sea un proceso lento y de frágiles equilibrios; pero que deliberadamente se siembre desde el poder la discordia, el rencor y la polarización, es a todas luces inadmisible.

Dijo que en contraste, la sociedad ha demostrado que es posible contrarrestar esta vertiente de amargura con acciones solidarias, genuinas y concretas, como justamente se han desplegado por ejemplo en esta pandemia.

Por otra parte, advirtió que este ambiente artificiosamente generado, hace que se evada, ignore o vulnere a quienes son presa de la violencia, discriminación y estigmatización: a la niñez capturada por la trata, a los migrantes, a los desaparecidos y a las víctimas de la inseguridad, a quienes son violentados por su orientación sexual, a las mujeres reducidas a objetos de placer; y a quienes se ven inmersas en un embarazo no deseado: la madre y el o la niña por nacer.

Baños Ardavín acotó, “sobre esto último y las recientes resoluciones de la Corte, se reabre un debate que no puede reducirse a un torpe, y casi siempre estéril juego de banderas. Desde nuestra perspectiva, el asunto debe abordarse sin sobre-simplificaciones ni sesgos ideológicos; por el contrario, se requiere una reflexión rigurosa, con elementos científicos, antropológicos y filosóficos que permitan, por una parte, encontrar soluciones acordes a la dignidad humana, en específico la de la madre gestante y la del concebido; y por otra, también la imputación de responsabilidades al hombre que en esta situación, las más de las veces, se auto-exime cobardemente”.

De igual forma, comentó que este contexto, es en efecto deber del Estado procurar los medios para no re-victimizar a las madres que se han visto envueltas en el drama del aborto; y en la misma línea es preciso salvaguardar los derechos humanos del ser en gestación, tomando en cuenta la evidencia científica que hace ver que, si bien con capacidades en continuo desarrollo, desde la concepción se tiene una vida humana única, irrepetible y diferenciada.

Manifestó que en todo caso, lo que no es válido es esquivar la definición sobre la consideración del estatus de este ser, y al mismo tiempo sentenciar que sus derechos quedan anulados al ser supeditados a los de otra persona, o que se postergan en tanto no haya nacido. Una determinación jurídica de esta gravedad, no se puede tomar con tan pobre sustento; como tampoco se puede admitir que se violente el derecho a objetar en conciencia el ser partícipe de un procedimiento que derive en la aniquilación -que no la interrupción- de una vida humana en gestación.

Ante este reto, y sin pretender en absoluto agotar el tema, es imperativo encontrar un camino que sepa acompañar, respetar y promover derechos y libertades, procurando el mayor bien posible, para todos. En palabras de Juan Rulfo: “nos salvamos juntos o nos hundimos separados”, enfatizó Baños Ardavín.


Foto: Es Imagen / Katia Fernández

Comentó, que se viven tiempos extraordinarios. Sin embargo, este tiempo de pandemia ha sido de suyo extraordinario, pues prácticamente todas las facetas de nuestras vidas se han visto alteradas; de esto nadie ha estado exento, es un fenómeno global, de especificidad individual. Agregó, como lo ha manifestado el Papa Francisco, “De una crisis no se sale igual: salimos mejores o peores”.

Dijo que en este contexto, el presente Informe comprende un periodo por demás desafiante para la universidad, tanto por las exigencias que la pandemia nos ha planteado en términos sanitarios, pedagógicos, tecnológicos, psicoemocionales y financieros, como por los objetivos y proyectos que conforman nuestro plan estratégico.

Asimismo, presentó a los presentes en el Informe de Actividades 2020-2021, los avances de UPAEP durante esta etapa tan singular, enmarcados en lo que ha sido el plan de vuelo: las cinco líneas rectoras de la Visión rumbo al 50 aniversario de UPAEP, en el año 2023.

Baños Ardavín subrayó que la cultura del encuentro fincada en el humanismo cristiano es la que congregó a casi 17 mil jóvenes y profesionistas que, acompañados de sus familias, eligieron a UPAEP como su casa de estudios. Cerca de 5 mil quinientos estudiantes de otros estados de la República y 170 extranjeros nos dieron su voto de confianza en época de incertidumbre, pero de gran compromiso con nuestra misión institucional y la calidad educativa.

Asentó que la universidad en otoño como en primavera pasados, operó las clases 100% en modo virtual, trasladando a las familias los ahorros operativos con un 10% de descuento generalizado en colegiaturas; adicionalmente, más de 4 mil seiscientos estudiantes se beneficiaron con las becas otorgadas desde UPAEP, y otros 426 se beneficiaron con becas externas; y como parte del programa PROEDUCA para nuestros colaboradores se brindaron 912 apoyos.

El rector de la UPAEP, explicó, “el Modelo Educativo U50 es la esencia de la propuesta UPAEP. Brevemente, describo sus tres rasgos distintivos: 1o. Integra los elementos de la filosofía institucional definidos en nuestro Ideario, 2o Refiere un enfoque pedagógico propio, denominado pedagogía del bien común, y 3o. Aterriza la propuesta educativa en las experiencias significativas a través de los Sistemas Académicos de Pertinencia Social (SAPS).

Manifestó que el 97% de la matrícula de Licenciatura cursa sus estudios en Programas de Calidad Acreditada por CIEES y COPAES; y en posgrados seguimos liderando en todo el sureste del país, contabilizando 14 programas en el Padrón Nacional de Calidad (PNPC) de CONACYT.

Dijo que otra evidencia que valida la calidad académica es el Examen General de Egreso de Licenciatura que realiza el CENEVAL. Nos sentimos sumamente orgullosos de que en este último año tan peculiar, 211 egresados obtuvieran el Testimonio de Sobresaliente y además, que 25 de ellos fueran reconocidos con el Premio al Desempeño de Excelencia EGEL.

Enfatizó que en este año la UPAEP decidió someterse a la certificación del QS Rating System, uno de los sistemas de evaluación más grandes y prestigiados del mundo, el cual nos otorgó cuatro de cinco estrellas a nivel general, cuestión poco común cuando se participa en el primer ejercicio de auditoría.

“En dicho veredicto, obtuvimos la máxima distinción de reconocimiento con cinco estrellas en las categorías de ‘desarrollo académico’ y ‘responsabilidad social’, resultado que respalda la filosofía y el sello UPAEP de la búsqueda del bien común”.

Refirió que Los Sistemas Académicos de Pertinencia Social (SAPS), son la forma concreta para aterrizar la propuesta educativa de UPAEP; a través de su despliegue buscamos responder al “cómo” desarrollar la formación integral de los estudiantes.

Puntualizó que desde la docencia, la investigación y la extensión, los SAPS nos han permitido abordar retos, atender problemáticas socioeconómicas, detectar oportunidades e impulsar nuevos proyectos productivos, sociales y culturales con base en el pensamiento social cristiano.


Foto: Es Imagen / Katia Fernández

De entre varios proyectos de emprendimiento e innovación que se implementaron durante el periodo con este enfoque, destacamos: -el Programa de Capacitación empresarial para el fomento a la reactivación económica de las Mipymes que se encuentran ubicadas en el Municipio de Coronango Puebla, -el Programa de desarrollo empresarial a 5 microempresas de la comunidad Balloon Latam Huejotzingo; así como -el Programa de desarrollo empresarial a 6 microempresas de la comunidad U-Market, y KONECTOR UPAEP con el Seminario Latinoamericano de Educación para Impulsar el Emprendimiento Rural.

Acotó que la UPAEP cuenta con 156 laboratorios de vanguardia, de los cuales 132 son utilizados para docencia e investigación, 34 de ellos prestan atención al público, y 17 son exclusivos para investigación.

Durante la pandemia por la covid-19, contratamos una plataforma digital que integra 250 laboratorios virtuales que permitieran el desarrollo de habilidades, conocimientos y destrezas en diferentes áreas del conocimiento, con el equipamiento, insumos y medidas de seguridad idénticos a los que se encontrarían en un laboratorio real, con un diseño armonizado con los resultados de aprendizaje que las diversas materias requieren. Los estudiantes con un sólo clic desde el Blackboard de su asignatura tienen acceso a estos laboratorios.

De igual forma, comentó que en suma, este año se intervinieron 2,348 m2 de remodelaciones y 1,637 m2 de construcciones. Para asegurar el éxito de nuestros estudiantes, así como contribuir a la sostenibilidad y el crecimiento institucional por medio de soluciones e infraestructura tecnológica de punta, acompañados de procesos ágiles y transparentes en un ambiente de innovación y colaboración institucional, contamos con el Plan Estratégico de Tecnologías de la Información.

Se invirtió en el equipamiento de 213 salones y laboratorios con cámaras de video, audio y adecuaciones para mejorar la ventilación y favorecer el modelo híbrido, y se activaron 289 equipos de cómputo para uso remoto virtual.


Foto: Es Imagen / Katia Fernández

Puntualizó que las Prepas UPAEP son un yacimiento vivo que nos recuerda la alegría, entusiasmo, energía y vigor de la juventud; nuestro propósito educativo es el de forjar cuerpo, mente y espíritu de miles de jóvenes, responsabilidad que recae en un grupo excepcional de docentes y colaboradores que abrazan el espíritu águila.

Este año hemos alcanzado el mayor registro de matrícula que se tenga en el sistema, el cual reporta 3,338 estudiantes y 316 colaboradores acompañándolos académica y formativamente, destacó el Rector.

Con respecto al tema de la infraestructura, dijo que sin duda el reto más grande para el sistema de Educación Media Superior UPAEP fue la construcción de la nueva Prepa Angelópolis desde donde hoy presentamos el Informe 2020-2021, pues además de contar con poco más de 25 mil m2 de extensión y con aproximadamente 6,600 m2 de construcción, se convirtió en el primer proyecto diseñado y desarrollado en el marco de la nueva realidad.

Externó, “Amigas y amigos, estos desafíos de nuestro tiempo, son eminentemente universitarios. Todo lo que hoy hemos compartido tienen una razón de ser, y es el de convocar a nuestros jóvenes para procesarlos con conciencia crítica, y comprometer su proyecto de vida con la transformación de esas realidades que están a la espera de su talento y creatividad para transformarlas y para humanizarlas”, concluyó el Dr. Baños Ardavín.

septiembre 14, 2021 - 8:40 pm

Por: Staff

Educación, Noticias Destacadas

Te recomendamos: