A 47 días de la fecha oficial del Brexit, el Gobierno británico pidió este domingo a los legisladores que den más tiempo a la Primera Ministra, Theresa May, para que revise el acuerdo de separación con la Unión Europea.
El Parlamento británico aprobará el plan de May «no más tarde del 27 de febrero», señaló el Secretario de Comunidades, James Brokenshire.
La promesa es un intento de evitar un enfrentamiento el jueves, cuando la Cámara de los Comunes deberá votar los próximos pasos en el proceso del Brexit. Algunos legisladores quieren tratar de dirigir al país hacia una salida más suave del bloque.
Está previsto que Gran Bretaña abandone la Unión Europea el 29 de marzo, pero el Parlamento británico ha rechazado el acuerdo de separación que propuso May, lo que llevó a la Primera Ministra a buscar cambios ante unas reticentes autoridades comunitarias, quienes insisten en que ya no se le harán cambios al proyecto.
La parálisis podría derivar en una caótica salida «sin acuerdo», lo cual podría ser doloroso para las empresas y gente común en ambos lados del Canal.
Las empresas británicas temen que un Brexit sin acuerdo causará caos en los puertos porque ya no habrá reglamento de comercio o tablas para imponer aranceles, controles de aduanas y otras barreras entre Reino Unido y la UE, su principal socio comercial.
La Ministra austriaca de Asuntos Exteriores, Karin Kneissl, dijo a la BBC que una «salida desordenada» era ahora la opción más probable.
Los opositores del Gobierno acusan a May de perder tiempo deliberadamente para que el Parlamento se enfrente a una elección de último momento entre su acuerdo y ningún acuerdo.
Carolyn Fairbairn, de la Confederación de la Industria Británica, dijo que no lograr un acuerdo a tiempo era `negligencia en nombre de las instituciones políticas y líderes.