El príncipe Harry eliminó fragmentos de sus memorias ante el temor de que su padre, el rey británico Carlos III, y su hermano William nunca le «perdonasen» ciertas revelaciones incómodas.
El primer proyecto [del libro] era muy distinto. Era de 800 páginas y ahora solo tiene 400. Hubieran podido ser dos libros. Lo más difícil fue quitar cosas», aseguró en una entrevista publicada el viernes en el diario The Telegraph. «Pasaron cosas, sobre todo entre mi hermano y yo, y hasta cierto punto entre mi padre y yo, que no quiero que el mundo sepa. Porque creo que nunca me perdonarían», añadió.
El libro, titulado «Spare» [«En la sombra» en español] salió a la venta el martes y conoce un éxito fulgurante.
Nadie se libra en esta biografía de las críticas de Harry, y menos que nadie su hermano William, heredero del trono británico, a quien define como su «mejor enemigo».
El hijo menor de Carlos III describe a William como un hombre colérico y asegura que nunca aceptó a su esposa Meghan, a quien veía como «maleducada y agresiva».
Harry aseguró que decidió sacar a luz sus dolencias no para «hundir» a la monarquía, sino porque consideraba que le incumbía tratar de reformarla para proteger a los hijos de William (Jorge, de 9 años, Carlota, de 7 años, y Luis, de 4).
Sé que de estos tres niños, al menos uno acabará como yo, el sustituto», afirmó. «Y eso me duele, me preocupa», añadió en la entrevista, realizada antes de la publicación del libro en California, donde vive. «No se trata de intentar hundir a la monarquía, sino de salvarla de sí misma», afirmó. «Sé que seré crucificado por muchas personas al decir esto», admitió, reiterando que, pese a todo deseaba reconciliarse con su familia.
También se dirigió directamente a la familia real y le pidió que se disculpara ante su esposa Meghan «porque saben lo que hicieron». «Entonces, admítanlo y podremos pasar a otra cosa», añadió.
El príncipe Harry ya había ajustado cuentas con su hermano en una controvertida serie documental titulada «Harry & Meghan» y estrenada por Netflix en diciembre.
En ella, él y Meghan Markle, de 41 años, relataron sus dificultades en el seno de la familia real y achacaron gran parte de su infelicidad a los ataques racistas contra la exactriz, que es mestiza, y el acoso de la prensa sensacionalista británica.
El palacio de Buckingham no ha reaccionado hasta ahora a la publicación del libro.
AFP