En medio del vasto y gélido paisaje antártico, una singular estructura rocosa ha capturado la atención del mundo, avivando debates y teorías sobre su origen y naturaleza.

Ubicada en las coordenadas 79°58′39.25″S 81°57′32.21″W, esta formación, que algunos comparan con las icónicas Pirámides de Giza en Egipto, despierta interrogantes que oscilan entre lo científico y lo misterioso.

¿Qué es la pirámide de la Antártida?
La simetría y los ángulos distintivos de esta estructura han alimentado teorías que van desde lo extraterrestre hasta lo ancestral. Sin embargo, la comunidad científica sostiene que esta formación es simplemente el resultado de procesos geológicos naturales.

Eric Rignot, profesor de ciencias del sistema terrestre en la Universidad de California, aclara que la imagen de Google Earth que ha popularizado esta «pirámide» es simplemente una montaña que parece tener esa forma.

El doctor Mitch Darcy, geólogo del Centro Alemán de Investigación de Geociencias, destaca que esta «pirámide» forma parte de una cadena montañosa de más de 400 km de largo, lo que sugiere que la presencia de picos rocosos en la región no es sorprendente.

No es una forma complicada, por lo que tampoco es una coincidencia especial. Por definición, es un nunatak, que es simplemente un pico de roca que sobresale sobre un glaciar o una capa de hielo. Ésta tiene forma de pirámide, pero eso no la convierte en una construcción humana”, dijo a IFLScience.

Él subraya que, por definición, es un nunatak, un pico de roca que emerge sobre un glaciar o una capa de hielo, y que su forma piramidal no implica necesariamente una construcción humana.

Mauri Pelto, profesor de ciencias ambientales en Nichols College, explica que la característica piramidal probablemente se originó debido a la erosión por hielo y deshielo. Durante el día, la nieve o el agua llenan las grietas de la montaña, y en la noche, con las bajas temperaturas, la nieve se congela y se expande, provocando el crecimiento de las grietas.

Este proceso se repite innumerables veces, dando forma a la estructura.

Si bien la uniformidad en la erosión de tres de los cuatro lados de la «pirámide» indica una consistencia en el tipo de roca, Pelto sugiere que fenómenos similares han dado forma a otras montañas en el mundo, como el Matterhorn en los Alpes.

Las montañas Ellsworth, donde se encuentra esta estructura, son la cadena más alta de la Antártida, dentro del reclamo territorial chileno, descubiertas en 1935 por Lincoln Ellsworth.

En conclusión, la «pirámide» de la Antártida, lejos de ser un enigma sin resolver, es el resultado de procesos geológicos naturales que moldean el paisaje antártico. Aunque su apariencia pueda sugerir misterios ancestrales o extraterrestres, la ciencia nos recuerda que la naturaleza es capaz de crear maravillas que desafían nuestra imaginación sin necesidad de recurrir a lo paranormal.

Excelsior