El concepto de la pintura es un idioma, un medio de interpretación, es el legado más grande que existe desde el principio de la civilización, es científico, representa la forma de ser de la vida humana, gracias a la pintura podemos reconstruir la historia, podemos reinterpretar la forma de vida y podemos entender el uso de los materiales; la pintura es la representación de una expresión del sentimiento, conceptualizarlo es relacionarlo a su uso y así poder entender la historicidad en el diseño de sus formas.
La pintura, como la debemos entender, es un método de interpretación, es una forma de diálogo, es un método lingüístico, es un confort para la vida. Como elemento de representación, nos interpreta la enseñanza de técnica, del uso del color y forma de pigmentarlo y genera un ejemplo de lo que se puede dar en la actualidad.
“Desde las primeras pinturas rupestres realizadas hace 30,000 años hasta el arte abstracto del siglo XX, desde que el hombre es hombre, el ser humano ha sentido la imperiosa necesidad de representarse a sí mismo, y su mundo a través de imágenes, de dioses inmortales, animales u objetos abstractos, así se recrea la inmensa diversidad y muestra los vínculos que unen a las obras creadas a lo largo de los milenios en los distintos confines del mundo.” (Valle R.2008; pág. 3).
La pintura habla, la pintura transmite, la pintura define la función del espacio y el comportamiento humano. En la vida de la humanidad la transmisión de formas se debe al concepto de ver y sentir los métodos de interpretación, esto se refleja en la pintura como un elemento universal que comprende la fe y puede ser el drama del entendimiento de una acción, puede ser la redención como un acto de esperanza, pero lo más importante es que la pintura nos refleja la espiritualidad de lo espontáneo, sus tonos y formas nos condenan a reconocer episodios, que confluyen directamente en la memoria colectiva, plasmada por los artistas en un método de interpretación.
Las artes en color siempre han sido el reflejo de la vida en esas épocas, la flora y la fauna, así como los momentos de vida cotidiana, se observan y determinan en cada espacio, y así gracias a estos vestigios entendemos un pasado, y podemos preparar su conservación para un futuro inmediato.
Podemos determinar que la combinación de métodos, técnicas y formas, crean el conocimiento de interpretación del valor de la cultura social y nos dan un mensaje que se repite en todos los momentos de la vida, desde el pasado más remoto y que podemos leer y reinterpretar hasta nuestros días.
El Bisonte de la Cueva de Altamira
Pintura Mural de la Casa del Deán
Pintura Mural de la Casa de Alfeñique
Valle R. Caminero N. Dolors G. (2008).30,000 Años de Arte, la Historia de la Creatividad Humana a través del tiempo y del espacio. Phaidon press limited. China