Alrededor de 82.4 millones de personas, a nivel mundial, son desplazadas por la fuerza de su lugar de origen

México por la situación de la llegada de migrantes de otras partes de Latinoamérica, ya posee los cuatro flujos de personas, como es el flujo de tránsito, el flujo de origen, el flujo de destino y el flujo de retorno y Puebla es un estado de tránsito que también posee estos cuatro movimientos.

Los refugiados en México y el mundo, es un tema relevante por la problemática social que representa el desplazamiento forzado de personas a través de las fronteras por cuestiones de violencia, señaló Derzu Daniel Ramírez Ortiz, Director de la Licenciatura en Administración Financiera y Bursátil de la UPAEP.

Dijo que se debe tener claro el concepto de refugiado desde el punto de vista jurídico, y la protección internacional para aquellas personas que tienen temores fundamentados en considerarse perseguidas por motivos de raza, de religión, nacionalidad, pertenencia, determinado grupo social u opiniones políticas que enfrentan condiciones generalizadas de violencia, violación masiva de derechos humanos o circunstancias que alteren el orden público y a causa de estos temores, no pueden o no quieren regresar a su país de origen.

Derzu Ramírez expresó que a nivel internacional existen ciertas circunstancias que han exacerbado la problemática del desplazamiento forzado de las personas. Agregó, “hoy mismo con la guerra de Ucrania y Rusia, se plantea que hay más de ocho millones de desplazados por este conflicto internacional, además de las problemáticas que existen desde hace años atrás en lugares como Irak, Siria, y otros lugares del mundo en donde existe una violencia generalizada y una violación de derechos humanos, así como la existencia de diferentes lugares fallidos en donde también existen disputas étnicas y todos estas situaciones, provocan el desplazamiento forzado de personas.

Subrayó que actualmente la ACNUR que es la agencia de las Naciones Unidas para el refugiado estima que existen 82.4 millones de personas a nivel mundial desplazados por la fuerza de su lugar de origen y alrededor de 25 millones de refugiados, es decir, personas que se han acogido al principio jurídico que acabo de mencionar.

Indicó que acorde con los instrumentos internacionales una persona refugiada cuenta con derechos y protección internacional, pero, son dos los derechos principales que tienen estas personas, el primero se refiere al principio de la no devolución, es decir, que una persona con temores fundados como sufrir violencia o de que su vida peligre, no sea devuelto a su país de origen por un tercer país ajeno. Y, el segundo principio, es recibir toda la asistencia del estado receptor para poder acceder a sus derechos de forma digna, es decir, que la persona refugiada pueda integrarse en la sociedad que lo acoge.

Señaló que los países latinoamericanos, algunos sudamericanos y algunas naciones caribeñas e incluido México, son países productores de refugiados, porque en muchos de ellos imperan situaciones de violencia bastante importantes y que con el tiempo van creciendo desafortunadamente.

Dijo que la tasa de homicidios en México es una de las más grandes a nivel mundial con 26 homicidios por cada 100 mil habitantes; en el caso de El Salvador, la tasa de homicidios crece a 37 por cada 100 mil habitantes y en el caso de honduras es de 36 personas por cada 100 mil habitantes y en el caso de México, hay demarcaciones que son controladas por el crimen organizado que extorsionan y violentan a personas o ciudadanos que los orillan a moverse de manera forzada.

Ramírez Ortiz refirió que en estos momentos, México no cuenta con las instituciones sólidas y preparadas para acoger todo ese flujo de migrantes que huyen de situaciones de violencia y de cómo se están integrando a la sociedad mexicana; además de que nuestro país se está convirtiendo en un expulsor de refugiados o potenciales refugiados.

En su intervención, Xamara Navarrete Cisneros, de Servicio Jesuita al Migrante del Área de Atención del Territorio Centro, comentó que desde este organismo uno de los principales obstáculos que han encontrado es la espera que tienen las personas para contar con esta protección internacional.

Asimismo, expresó que también este organismo ofrece apoyos de acompañamiento en cuanto a salud mental, porque durante el camino de las personas, están expuestas a asaltos, delitos, la vulnerabilidad de ser víctimas del crimen organizado, entre otros, mientras intenta llegar a su punto de destino.

Abundó que se mueven en un escenario en donde el Servicio Jesuita al Migrante, busca proteger a las personas que están en estas condiciones y defenderlos de este miedo y persecución que sufren desde el país de origen. Además de que los procesos de atención para este grupo de personas son muy largos y por ello, es importante establecer redes de apoyos para defender los derechos de estas personas.

Por su parte, Alejandra Domínguez, Sánchez, Asociada de Protección, del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR Puebla), enfatizó que México por la situación de la llegada de migrantes de otras partes de Latinoamérica, ya posee los cuatro flujos de personas, como es el flujo de tránsito, el flujo de origen, el flujo de destino y el flujo de retorno y Puebla es un estado de tránsito que también posee estos cuatro movimientos.

Manifestó que la situación que hay en el Triángulo Norte-Centroamérica es complicada, cada vez es más violenta y toda la violación de los derechos humanos que hay en América Latina, hablando de Nicaragua, Venezuela, Colombia, y toda la crisis humanitaria que también está obligando a las personas a huir.

Recordó que México como nación, no es nuevo para acoger a la gente que viene en busca de asilo, de encontrar un refugio, pero ahora, los sistemas y desconocimientos a los que pueden apegarse las personas que vienen de otras naciones, los hacen más vulnerables.

Apuntó que la ACNUR Puebla habla principalmente sobre la integración de las personas, de las asociaciones que se dan a la tarea de salvaguardar a estos grupos de personas que llegan con muchas necesidades, en lo educativo, en el campo de la salud y en el aspecto económico.

Mientras que los estudiantes Juan Carlos Gazca y Paola Álvarez de la Licenciatura en Relaciones Internacionales y Alondra Carrillo, estudiante de la Licenciatura en Logística de Negocios, y que forman parte del Grupo estudiantil, Alas Sin Fronteras de la UPAEP, han tenido un trabajo muy significativo al acercarse con gente que formar parte de este fenómeno de la migración y estuvieron realizando trabajo de campo en la ciudad de Tijuana en albergues afiliados al Servicio Jesuita al Migrante, para observar comportamientos, necesidades y sufrimientos a los que se tienen que enfrentar estos grupos de personas, para dar paso a la realización de un documental que esperan terminar para el mes de septiembre y la elaboración de un artículo de investigación para conocer más sobre este fenómeno social.

Por último, Ared García González, de DIME A.C. (Diálogo Intercultural Mexicano, antes, Proyecto Habesha), acotó que a nivel internacional, del total de personas que se encuentran incluidas en esta categoría de refugio, solamente el 5% tiene acceso a la educación superior, cifra muy baja y que nos invita a reflexionar a que son muchas las personas que se están quedando fuera de este derecho universal que todos deberían tener, que es el derecho a la educación superior.

Indicó que en México y en América Latina, DIME A.C. es la única organización que está moviendo este tema y que la labor que está haciendo al respecto, se está reconociendo en diferentes foros internacionales y a nivel nacional.

junio 22, 2022 - 7:15 pm

Por: Staff

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