Investigar es más que seguir una receta

El refinamiento permanente de las estructuras del pensamiento es fundamental para desarrollar trabajos investigativos ordenados, significativos y con impacto social.

A Luz del Carmen Montes Pacheco, investigadora de la Ibero Puebla, le tomó dos epidemias publicar su libro Estrategias para la formulación de proyectos universitarios: concibió las ideas preliminares durante la crisis de influenza A H1N1 y terminó el compendio en medio de la pandemia de covid-19.

Durante la cuarentena de 2009, su trabajo como docente la impulsó a constituir una recopilación de ideas y conceptos básicos de redacción y estructuración para proyectos de investigación. Aquella primera maqueta, titulada Los verbos prohibidos, fue perfeccionada y complementada con los intercambios de ideas que la autora sostuvo con estudiantes y colegas.

Poco más de una década después, el libro devela una revalorización intelectual y afectiva de la pedagogía como disciplina, pues se incluyen espacios reflexivos y prácticos donde se explica cómo llevar a cabo proyectos académicos desde cualquier área del conocimiento.

Al compartir sus impresiones en un foro virtual, Pilar Baptista Lucio, investigadora de la Escuela de Pedagogía de la Universidad Panamericana, destacó el abordaje del compilado en el trabajo de planeación y delimitación de proyectos. El proceso de investigación, recordó, es parte importante de la formación del estudiante, pues lo lleva a desarrollar procesos internos de coherencia, lógica, argumentación, pensamiento crítico y habilidades comunicativas.

La autora enfatiza que el correcto desarrollo de proyectos concentra una serie de competencias que son de gran utilidad para todas las profesiones. “La educación universitaria implica una formación integral que considere a los futuros profesionistas que van a enfrentar retos sociales”, remató Baptista Lucio.

El texto es un ejercicio de reflexión producto de la experiencia profesional de la autora. Entre sus páginas se encuentran aproximaciones y delimitaciones de proyectos que clarifican las diferencias entre los modelos posibles de investigación e intervención. En la matriz final, esboza los aspectos necesarios para evaluar los protocolos y procesos de evaluación.

Para Luis Medina Gual, coordinador del Doctorado Interinstitucional en Educación de la IBERO Ciudad de México-Tijuana, Montes Pacheco ofrece un trabajo instructivo desde la lógica de competencias. Esto se aprecia en la presentación didáctica los pasos para realizar un protocolo a través de ejemplos y abordajes minuciosos de cada uno de los capítulos.

Como recomendación al texto, exhortó a profundizar en las diferencias entre los proyectos de investigación y los de intervención. De igual manera, impulsó a la autora a extrapolar la primera entrega a un trabajo sobre los procesos de elaboración de una tesis de grado o posgrado.

Cuando la obra fue presentada a un comité de expertos de la IBERO Puebla, las retroalimentaciones abundaron en elogios al andamiaje metodológico y su estructura pensada para ser una guía, así como su carácter de herramienta de uso práctico al alcance de todos los públicos. Aquella revisión también contribuyó a trascender su concepción inicial como manual para pasar a ser un libro formal.

En su intervención, Oscar Soto Badillo, director de Investigación y Posgrado de la Universidad Jesuita, exhortó a contar con el compendio como una herramienta presente en los procesos de enseñanza y aprendizaje. “Si ahora tenemos mejores tesis [en la Universidad] se debe mucho a las instrucciones de Luz del Carmen Montes sintetizadas en este libro”.

La propia Luz del Carmen Montes complementó que durante sus cursos ha observado las escasas reflexiones en las primeras etapas de conceptualización de proyectos. “Todos los profesores tenemos un gran reto para articular nuestras ideas. El proyecto tiene que pensarse como un sistema”, reflexionó la autora de formación en ingeniería.

El panel coincidió en que el uso adecuado del lenguaje es uno de los principales conflictos de los estudiantes. El refuerzo de las habilidades lingüísticas de los profesionistas, de todas las áreas, tendría que ser prioridad en complementos posteriores a Estrategias para la formulación de proyectos, así como la armonización entre los enfoques de investigación cualitativo y cuantitativo.

mayo 14, 2021 - 4:15 pm

Por: Staff

Educación

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