Una junta de Indiana decidió el jueves por la noche reprender a una doctora de Indianápolis luego de descubrir que violó las leyes de privacidad de los pacientes al hablar públicamente sobre abortar a una víctima de violación de 10 años del vecino Ohio.

La Junta de Licencias Médicas del estado votó que la Dra. Caitlin Bernard no cumplió con las leyes de privacidad cuando le contó a un reportero sobre el tratamiento de la niña en un caso que se convirtió en un punto álgido en el debate nacional sobre el aborto días después de que la Corte Suprema de los Estados Unidos anuló Roe v . Wade el verano pasado.

Sin embargo, la junta rechazó las acusaciones del fiscal general republicano de Indiana de que Bernard violó la ley estatal al no denunciar el abuso infantil a las autoridades de Indiana.

Los miembros de la junta optaron por multar a Bernard con $3,000 por las violaciones, y rechazaron una solicitud de la oficina del fiscal general para suspender la licencia de Bernard. La junta no emitió restricciones en su práctica de la medicina.

Bernard siempre ha defendido sus acciones , y el jueves le dijo a la junta que siguió los requisitos de informes y la política del hospital de Indiana al notificar a los trabajadores sociales del hospital sobre el abuso infantil, y que las autoridades de Ohio ya estaban investigando la violación de la niña.

Los abogados de Bernard también dijeron que ella no dio a conocer ninguna información de identificación sobre la niña que violaría las leyes de privacidad.

El Indianapolis Star citó el caso de la niña en un artículo del 1 de julio que provocó un alboroto político nacional en las semanas posteriores a la decisión Roe v. Wade del verano pasado que puso en vigencia una ley de Ohio que prohibía los abortos después de las seis semanas de embarazo.

Algunos medios de comunicación y políticos republicanos sugirieron falsamente que Bernard fabricó la historia, hasta que un hombre de 27 años fue acusado de violación en Columbus, Ohio. Durante un evento en la Casa Blanca, el presidente Joe Biden estuvo a punto de gritar su indignación por el caso.

El presidente de la junta médica, el Dr. John Strobel, dijo que creía que Bernard fue demasiado lejos al decirle a un reportero sobre el aborto pendiente de la niña y que los médicos deben tener cuidado al observar la privacidad del paciente

“No creo que ella esperara que esto se volviera viral”, dijo Strobel sobre Bernard. “No creo que ella esperara que esta atención se dirigiera a este paciente. Lo hizo. Ocurrió.»

La abogada de Bernard, Alice Morical, dijo a la junta el jueves que el médico reportó abuso infantil de pacientes muchas veces al año y que un trabajador social del hospital había confirmado con el personal de protección infantil de Ohio que era seguro que la niña se fuera con su madre.

«Dr. Bernard no podría haber anticipado el escrutinio atípico e intenso que recibió esta historia”, dijo Morical. “Ella no esperaba que los políticos dijeran que ella inventó la historia”.

En medio de la ola de atención sobre el caso de la niña el verano pasado, el fiscal general de Indiana, Todd Rokita, que está estridentemente en contra del aborto, le dijo a Fox News que investigaría las acciones de Bernard y la llamó “activista del aborto actuando como doctora”.

El fiscal general adjunto, Cory Voight, argumentó el jueves que la junta necesitaba abordar lo que llamó una «violación atroz» de la privacidad del paciente y el hecho de que Bernard no notificó al Departamento de Servicios Infantiles de Indiana ya la policía sobre la violación.

“No ha habido ningún caso como este ante la junta”, dijo Voight. “Ningún médico ha sido tan descarado en la búsqueda de su propia agenda”.

Voight le preguntó a Bernard por qué discutió el caso de la niña de Ohio con el reportero del periódico y luego en otras entrevistas con los medios de comunicación en lugar de utilizar una situación hipotética.

“Creo que es increíblemente importante que la gente entienda los impactos en el mundo real de las leyes de este país sobre el aborto”, dijo Bernard. “Creo que es importante que la gente sepa por lo que tendrán que pasar los pacientes debido a la legislación que se está aprobando, y una hipótesis no tiene ese impacto”.

El miembro de la junta, el Dr. Bharat Barai, se opuso a encontrar que Bernard violó las leyes de privacidad y dijo que ella no divulgó información de identificación protegida directa, como el nombre o la dirección de la niña.

No estuvo de acuerdo con la opinión de la mayoría de la junta de que la combinación de información sobre el raro caso de una niña embarazada de 10 años podría haber expuesto su identidad.

“Estamos tratando de suponer que sí, esto podría haberse hecho y tal vez alguien podría haberlo descubierto”, dijo Barai.

Durante la audiencia del jueves que duró unas 13 horas, la oficina de Rokita mantuvo un comentario continuo en su cuenta oficial de Twitter, con una publicación que decía: “Cuando Bernard habló sobre la alta prioridad que le da a la legislación y hablar con el público, lo hizo a expensas de su propio paciente. Esto muestra cuáles son sus prioridades como activista más que como médica”.

Bernard se opuso a que Voight dijera que su elección de discutir públicamente el caso condujo a las acusaciones de mala conducta.

“Creo que si el fiscal general, Todd Rokita, no hubiera elegido hacer de esto su truco político, no estaríamos aquí hoy”, dijo Bernard.

Los abogados de la oficina del fiscal general plantearon repetidamente preguntas sobre si la política del empleador de Bernard, Indiana University Health, de denunciar sospechas de abuso infantil a las autoridades del estado donde ocurrió el abuso cumplía con la ley de Indiana.

Funcionarios de IU Health, que es el sistema hospitalario más grande del estado, testificaron que el Departamento de Servicios Infantiles de Indiana nunca se ha opuesto a la política del hospital.

La junta de Indiana, con cinco médicos y un abogado presentes que fueron nombrados o reelegidos por el gobernador republicano Eric Holcomb, tenía amplia libertad bajo la ley estatal que le permitía emitir cartas de amonestación o suspender, revocar o poner en libertad condicional una licencia médica.

La ley de Ohio que imponía casi una prohibición del aborto estuvo en vigor durante unos dos meses, antes de quedar en suspenso a medida que se desarrolla una demanda en su contra.

La Legislatura de Indiana, dominada por los republicanos, aprobó una prohibición del aborto en todo el estado semanas después de que el caso de la niña de Ohio llamara la atención, pero los abortos continúan permitiéndose en el estado mientras se espera una decisión de la Corte Suprema de Indiana sobre la constitucionalidad de la prohibición.

Bernard intentó sin éxito bloquear la investigación de Rokita el otoño pasado, aunque un juez de Indianápolis escribió que Rokita cometió “infracciones claramente ilegales” de las leyes estatales de confidencialidad con sus comentarios públicos sobre investigar a la doctora antes de presentar la denuncia de licencia médica en su contra.

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