El Departamento de Policía de Dallas desentraña un oscuro caso de culto a la Santa Muerte que llevó a la muerte a Marisela Botello. Charles Beltrán, Nina Marano y Lisa Dykes se enfrentan a la justicia, con revelaciones impactantes que han conmocionado a la comunidad hispana de Texas.

El Departamento de Policía de Dallas (DPD) y la fiscalía han presentado acusaciones en un caso que involucra culto a la Santa Muerte, relaciones amorosas complejas y un trágico asesinato.

El trio conformado por Charles Beltrán, Nina Marano y Lisa Dykes ahora se encuentra en el ojo del huracán judicial, enfrentando cargos que van desde manipulación de cadáver hasta homicidio capital.

La investigación, llevada a cabo en colaboración con el Buró Federal de Investigaciones (FBI), ha desenterrado una historia que mantiene en vilo a la comunidad hispana de Texas.

La relación comenzó en un bar donde Charles Beltrán conoció a Lisa Dykes, madre de un compañero de trabajo. Dykes, aparentemente, se convirtió en su mecenas y amante, extendiendo la relación a Nina Marano, quien también se unió como amante de Beltrán, culminando en un matrimonio legal entre Dykes y Marano.

El encuentro con Marisela Botello, una joven visitante, se convirtió en tragedia, cuando tras una noche de pasión y drogas, Dykes irrumpió celosa con un cuchillo, resultando en la muerte de Botello, aseguró Beltran.

Las acusaciones han generado disputas entre los propios acusados, con el abogado de Dykes etiquetando a Beltrán como «un mentiroso».

El cuerpo apuñalado de Marisela Botello fue encontrado seis meses después en una zona boscosa al sureste del área metropolitana de Dallas.

Los arrestos de Dykes y Marano en Camboya por parte del FBI, y de Beltrán en Utah por los U.S. Marshals, agregan un giro internacional a este sórdido relato.

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