En las últimas horas, un trágico hecho recorrió las redes sociales: una mujer, llamada Hellen Wendy Naybuto, murió ahogada mientras realizaba una transmisión en vivo para Facebook, al parecer, en un hotel de la ciudad de Toronto, Canadá.

En la grabación que la estudiante de enfermería de 23 años compartió, se la puede ver mientras responde los mensajes de sus seguidores antes de reanudar con su rutina de natación. A continuación, y en cuestión de segundos, se encontró en la parte más profunda de la piscina y se observa cómo lucha para mantenerse a flote. Según trascendió en los medios estadounidenses, al parecer no estaba acostumbrada a nadar en sectores con tales características.

El hecho, que ocurrió el 18 de agosto, es materia de investigación por las autoridades locales. Mientras tanto, los familiares de la keniana exigen que su cuerpo sea trasladado al país de origen para llevar a cabo el sepulcro. “Según nuestra tradición, se supone que uno debe ser enterrado donde nació. No me sentiré cómodo, psicológicamente, si mi hija es enterrada lejos de Kenia”, comentó Nyabuto John Kiyondi, padre de la fallecida, en conversación con CNN.

“Vi el video. Lloré. Es terrible. Ella se comunicó conmigo dos días antes de perder la vida. Sonaba muy bien y yo estaba muy contento. Me prometió un teléfono. No sentí nada anormal”, agregó. Diferentes reportes confirmaron que Hellen Naybuto vivía en un apartamento con su hermano menor, Enock, era trabajadora sanitaria de medio tiempo y el resto de su día lo dedicaba a cumplir con sus labores académicas.

El padre de Wendy, un agricultor de Kisii, al suroeste de Kenia, dijo que está “de vuelta hasta el punto de de partida” ahora que su hija se fue de este plano terrenal.

“Ella me ayudaba económicamente a educar a sus hermanos, sobre todo en lo que respecta a las cuotas escolares y otros gastos. Ahora estoy atascado. Me pregunto cómo van a seguir estudiando sus hermanos pequeños”, expresó al medio mencionado.

A pesar de las diversas preocupaciones, sostuvo que lo único que quiere ahora es que el cuerpo de su hija regrese a Kenia. Repatriar el cuerpo de Wendy es un alto costo para los escasos recursos de su familia, y por ese motivo Enock dijo que realizaron una campaña de GoFundMe para recaudar 50.000 dólares canadienses (unos US$ 38.000) para ayudar a afrontar los gastos de su entierro.

“La familia está pasando por un momento difícil ahora. Todo lo que queremos es que su cuerpo sea transportado a casa para su entierro”, concluyó Enock, quien también manifestó lo difícil que será repatriar el cuerpo de su hermana por los altos costos de transporte.

En las plataformas virtuales, cientos de personas se pronunciaron tras el fallecimiento y dejaron mensajes de condolencias para la familia de la joven. “Pobre chica, muy trágico”; “Qué desgracia, mi más sentido pésame a todos”; “Qué lástima que no había nadie presente para ayudar, mis mejores deseos para que salgan adelante juntos”, son algunos mensajes alusivos.

La Nación