Las posibilidades reales de Xóchitl

La polvareda que el “fenómeno Xóchitl” ha levantado en el escenario político hizo renacer las esperanzas en el bando opositor. No es para menos, la reacción del presidente de la República marcó la agenda y dejó ver que la señora X le resulta incómoda, un peligro para su proyecto político transexenal.

Hay 3 elementos que quiero comentar con usted para que juntos pensemos las posibilidades reales que tiene Xóchitl Gálvez de arrebatarle la Presidencia de la República al régimen de López Obrador. El primero tiene que ver con los factores económicos que han motivado al electorado a cambiar de partido político en la historia reciente del país. El segundo con la nueva conformación de bloques político electorales con base en las últimas elecciones del 2021 a la fecha. El tercero, se relaciona con los factores que estarán en juego en el 2024 y si éstos son favorables a Xóchitl o a López Obrador.

Para efectos del análisis daremos por hecho que la senadora del PAN, Xóchitl Gálvez, ganará la nominación presidencial del Frente Amplio Por México.

Mucho se ha dicho al respecto de las crisis económicas que anteceden a los cambios de partido político en la Presidencia de la República. Hagamos un breve repaso.

La crisis inflacionaria del sexenio de Miguel de la Madrid puso en entredicho la elección de Carlos Salinas en 1988; el PRI mantuvo el poder, pero estuvo a punto de perderlo con Cuauhtémoc Cárdenas, el candidato de la izquierda nacionalista.

La crisis de diciembre de 1994 marcó al sexenio de Ernesto Zedillo, quien rápidamente logró levantar el barco y llevó a la economía de México a crecer 7% en el año 2000. El daño ya estaba hecho y a pesar de la bonanza económica el PRI perdió las elecciones ante Vicente Fox.

El PAN retuvo la Presidencia en el 2006 en buena medida gracias a que la economía se mantuvo estable durante el sexenio de Fox y a que la estructura electoral del PRI operó a favor de Calderón para derrotar a López Obrador. Sin embargo, la crisis del sector inmobiliario de EUA contagió al mundo y México también sufrió las consecuencias durante el 2009, a la postre eso ayudó al PRI a recuperar la Presidencia en el 2012.

En 2017 el gasolinazo marcó el declive final del PRI en el sexenio de Peña Nieto. La gente percibió que la nueva política energética afectaba en lo que más le dolía: su ingreso familiar. Ese es un factor clave para entender el resurgir de López Obrador en la escena política nacional. Hasta antes del 2017, el líder social opositor tenía altos negativos y no se le veían posibilidades reales de ganar las elecciones del 2018. Fueron el gasolinazo de enero y luego el terremoto de septiembre del 2017, los factores que movieron la atención de la gente hacia un discurso disruptivo y anti sistema.

En resumen. La hiperinflación del sexenio de Miguel de la Madrid llevó al PRI a casi perder las elecciones en 1988. La crisis de 1994 antecedió al triunfo del PAN en el 2000. La crisis internacional del 2009 favoreció el retorno del PRI en el 2012. Y el gasolinazo del 2017 revivió a López Obrador en el 2018. Lo que ocurre en la política cuando la economía anda mal es un patrón que queda ahí como una señal digna de tomarse en cuenta. Por lo tanto, propongo esta hipótesis: las dificultades económicas que enfrentaron las familias durante la pandemia pudieron dejar marcas en la memoria de la gente en espera de que un discurso opositor reviva ese sufrimiento.

Otro factor es la tendencia de voto mostrada en las elecciones previas al 2024. Hace unas semanas en esta columna publicamos los datos sobre los votos que obtuvieron los partidos que conforman 4 bloques políticos en las elecciones locales efectuadas entre 2021 y 2023:

• El oficialista de MORENA, PT y PVEM obtuvo el 42.1% con 20.2 millones de votos
• El opositor del PAN, PRI y PRD obtuvo el 38.6% con 18.5 millones de votos
• El indefinido Movimiento Ciudadano obtuvo 7.6% con 3.7 millones de votos
• El de los partidos pequeños y los independientes obtuvo el 9% con 4.3 millones de votos
• El resto fueron votos nulos o por candidatos no registrados.

Los resultados de esas elecciones locales coinciden con las elecciones de diputados federales del 2021 en la que los bloques obtuvieron casi idéntica proporción de votos, lo que muestra una nueva tendencia política en el país luego de la irrupción de Morena en el 2018.

Las elecciones del próximo año las definirán 2 sectores que hasta este momento no podemos anticipar su comportamiento electoral. El primero y más numeroso lo conforman aquellos ciudadanos que no votaron ni en las elecciones locales ni en las federales entre 2021 y 2023 pero que sí van a participar en el 2024. En este segmento están los jóvenes que acudirán a las urnas por primera vez y los mayores que por alguna razón se abstuvieron, suman aproximadamente 10 millones. El otro sector lo conforman aquellos votantes que sufragaron por los partidos que perdieron su registro, por los partidos con registro local o por candidatos independientes, ellos suman 4.3 millones que en el 2024 no tendrán una cuarta opción de voto. Son en total poco más de 14 millones de electores que equivalen a 1 de cada 4 de quienes vamos a votar el próximo año.
Es probable que la mayoría de estos 14 millones de votantes prefieran a Movimiento Ciudadano como tercera opción, de ahí que Dante Delgado sueñe con ver crecer la rebanada del pastel que se pinta de color naranja. Si MC presenta un tercer candidato será una jugada a favor del oficialismo y en contra de la oposición. Pero, si Movimiento Ciudadano decide registrar a Xóchitl Gálvez como su candidata a la Presidencia de la República, significaría la estocada de muerte al oficialismo.

¿Se alinean los factores para que la oposición con Xóchitl Gálvez pueda ganar las elecciones del 2024? Por lo que hace a la crisis económica vivida durante la pandemia, tengo la sensación de que el sufrimiento colectivo se distribuye entre varios factores como las pérdidas de familiares y amigos, la incertidumbre propia de un enemigo invisible como es el virus, la violencia y la estrechez económica. Es decir, no fue solamente la economía la causa del sufrimiento en las familias, aunque quizá sea el efecto más persistente. Sin olvidar que durante esos meses la aprobación presidencial fue la más baja del sexenio.

Nadie sabe lo que hará Movimiento Ciudadano. Quizá pronto debería comenzar una campaña que ponga en perspectiva de la sociedad la trascendencia de la decisión de Dante Delgado, si opta por el autoritarismo del naciente régimen cuatroteísta o por la democracia liberal representada por el bloque opositor de los partidos tradicionales. Haga usted su pronóstico estimado lector, lectora, yo solo le pongo los ingredientes.

Foto: Es Imagen / Arlette Gordian

agosto 28, 2023 - 10:30 am

Por: Jose Zenteno

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